Porsche deja atrás la zona de baches

Porsche tuvo un beneficio operativo de 1.200 millones de euros (1.668 millones de dólares) en su último año fiscal, que concluyó el 31 de julio, 500 millones de euros (695 millones de dólares) más que el año anterior.

Aunque el productor de deportivos germano registró números rojos netos por segundo año consecutivo (el año pasado ascendieron a 3.600 millones de euros o 5.364 millones de dólares), prevé volver a la zona de beneficio neto en 2011, a partir desde cuando el año fiscal se corresponderá con el año del calendario como en el caso de Volkswagen.

La facturación subió este año casi un 18 por ciento, hasta 7.800 millones de euros (10.842 millones de dólares), frente al año pasado. Las ventas mejoraron un 9 por ciento, hasta 81.850 vehículos, por la buena acogida del nuevo modelo Panamera.

Volkswagen se hizo con una participación del 49,9 por ciento en Porsche después de que fracasara el intento del fabricante de deportivos de hacerse con el mayor productor automovilístico de Europa.

Porsche ha sufrido en su cuenta de resultados los efectos de la reducción de su participación en Volkswagen. Anteriormente había tenido ganancias de miles de millones con la negociación de los títulos de VW.

Se endeudó fuertemente para adquirir Volkswagen, operación que fracasó por la crisis financiera y errores estratégicos. En la próxima junta general de accionistas el 30 de noviembre, se votará una ampliación de capital para reducir la deuda de unos 6.000 millones de euros (8.340 millones de dólares).

La compañía quiere pagar un dividendo de 0,10 euros por acción preferente y 0,094 euros por acción ordinaria, el doble que el monto repartido el pasado año.