Altercados denuncias y mucha basura

Madrid- Basura en los andenes, cientos de papelillos de periódico troceados y montoneras de colillas en los ceniceros situados en la entrada a las bocas de Metro eran ayer la estampa que se encontraban los usuarios del suburbano cuando se cumplía el quinto día de huelga de los trabajadores que se encargan de la limpieza de las instalaciones del metro de Madrid.

Fuentes de la empresa pública señalaron que los servicios mínimos se cumplieron y que la cifra de trabajadores que habían seguido la huelga durante toda la jornada se situó en el 32 por ciento. En lo que se refiere a los incidentes, los más graves se vivieron el pasado jueves sobre las nueve menos cuarto de la noche cuando los vigilantes de la estación de Sol encontraron a al menos una persona abriendo las papeleras y vertiendo su contenido al suelo. Los agentes de seguridad de la estación, según adelantó la emisora Onda Cero, consiguieron retener a los supuestos piquetes de una de las empresas de limpieza y avisaron a la Policía Nacional cuyos efectivos procedieron a identificar a los individuos y a denunciarles por alteración de la huelga. Las mismas fuentes informaron que algo similar había ocurrido por la mañana en los andenes de Gran Vía.

Los vigilantes de las estaciones tampoco se libraron ayer de la presencia de los piquetes. En Fuenlabrada Central el personal de seguridad avisó al 091 tras producirse un altercado entre los seguidores de la huelga y el personal de servicios mínimos a los que, al parecer, increparon.

También hubo incidentes en Alto de Extremadura y Delicias dónde vaciaron extintores. Además en la segunda hicieron pintadas en las máquinas expendedoras de billetes. En Ciudad de los Ángeles aparecieron pintadas en los pasillos de la estación y en Lucero arrojaron un contenedor desde el exterior al vestíbulo.

Negociaciones

Según declaró la secretaria de sector limpieza FES-UGT, Carmen Solera, a Ep, al cierre de esta edición los sindicatos y las empresas concesionarias negociaban una salida al conflicto sin que se hubiera llegado a un pacto. En opinión de Solera, las empresas no están poniendo de su parte para alcanzar un principio de acuerdo. Los sindicatos piden que a todos los trabajadores que en la actualidad se encuentran con contratos «de fraude de ley» se les ofrezca un contrato fijo y cobren lo mismo que sus compañeros.