África

Crisis migratoria en Europa

Avalancha de menores en Canarias

Avalancha de menores en Canarias
Avalancha de menores en Canariaslarazon

madrid- Suma y sigue. La llegada de menores no acompañados a las costas canarias sigue en aumento. La última se produjo ayer en Tenerife, donde fue interceptada una patera con 64 personas a bordo, 14 de ellas menores de edad. Con éstos, son cerca de 150 los inmigrantes menores de 18 años llegados a las costas canarias en lo que va de año: uno cada 12 horas. En poco más de tres años, más de 2.600 menores han llegado a Canarias. En 2006 se rozaron los 1.000 tutelados (928), cifra que cayó hasta los 752 en 2007. Un año después, los menores que alcanzaron las islas fueron 813. Es una realidad preocupante, que ha llevado al Gobierno regional a pedir una solución de urgencia al Ejecutivo central. Y no es fácil. La legislación española no aplica la Ley de Extranjería a los menores de edad, sino la Ley del Menor. Esto hace que prácticamente ninguno sea devuelto a su país de origen. Además, la comunidad autónoma está obligada a asumir la tutela, guarda y custodia de los menores, que son internados en centros de acogida hasta que cumplen los 18 años. Después, quedan libres. Si consiguen integrarse, trabajar y tener los medios suficientes, pueden aspirar a la reagrupación familiar. Esta situación anima a las mafias a promover el embarque de menores, y las familias acceden porque consideran que, para sus hijos, es una oportunidad de poder labrarse un futuro en Europa. De hecho, muchos de los inmigrantes interceptados afirman tener menos de 18 años para que no se les aplique la Ley de Extranjería. Por ello, cuando llegan se les hace un análisis de los huesos para determinar su edad. La mayoría mienten. Un claro ejemplo es el del pasado martes, día en el que lo que en principio fue la patera con más inmigrantes menores de la historia, con 43, después de las pruebas de huesos pasó a ser una más de las embarcaciones interceptadas: sólo 12 de ellos eran realmente menores. 1.370 tutelados En la actualidad, según datos del Gobierno canario, 1.370 chicos que no han cumplido la mayoría de edad están bajo su tutela. Los centros de menores están al 100 por 100 de su capacidad: 242 plazas ocupadas. Los otros 850 inmigrantes tutelados en la comunidad están repartidos por los ocho centros creados a partir de la avalancha de pateras. El más saturado es el de La esperanza-El Rosario, que tutela a 395. Además, el Gobierno canario tiene la tutela y, por tanto, debe sufragar la manutención de otros 199 inmigrantes trasladados a la Península. El Gobierno regional considera que la situación económica es insostenible y que el Ejecutivo socialista tiene que tomar medidas. En declaraciones a Antena 3, el presidente canario, Paulino Rivero, indicó que su comunidad «no puede convertirse en la guardería de los niños de África, porque no tenemos capacidad». En palabras de Rivero, «nuestro Gobierno no lloriquea» para que el Estado se haga cargo de los menores inmigrantes, sino que «exige» que haga de esta cuestión «un asunto de Estado» y «se encargue de derivarlos a otras comunidades.