Conciertos

Con matrícula de honor

Con matrícula de honor
Con matrícula de honorlarazon

De Wagner. Voces: P. Domingo, M. Salminen, J. Uusitalo, E. Westbroeck, J. Wilson, A.Larsson, etc. Orquesta de la Comunidad Valenciana. Dirección de escena: La Fura dels Baus. Dirección musical: Z. Mehta. Palau de les Arts. Valencia, 24-VI-2009.

Superado con matrícula de honor el gran reto que se impuso Helga Schmidt en el Palau de les Arts al ofrecer dos ciclos completos de la «Tetralogía» wagneriana en producción propia. La hazaña, no realizada por ningún teatro español, tiene más merito por cuanto hablamos de una ciudad como Valencia, con menos de un millón de habitantes, en la que en los últimos tres años ya se habían representado los cuatro títulos. El nivel ha sido tal que no hay crítico ni aficionado viajero que no se encuentre de acuerdo en que ni en Bayreuth se puede ver y escuchar hoy un «Anillo» similar. Bayreuth tiene el ambiente y el sonido mágico del foso, pero no unos repartos de la consistencia y homogeneidad del Palau de les Arts. Luego, a unos les podrá gustar más la rotundidad de Thielemann y a otros las recreaciones de un Mehta, lentísimo al final de «Walkiria» aprovechando la calidad de una orquesta que no tiene tampoco nada que envidiar a la de la colina sagrada. Pequeños cambiosMuestra del nivel de los ciclos completos ofrecidos es que al Palau y a Opus Arte no les ha importado tirar a la basura el «Siegfried» ya grabado el pasado año para efectuar una nueva toma con el actual y espectacular reparto. «La Walkiria» de la Fura quizá guste ahora más que hace dos años, en parte porque no hay en ella tanto barroquismo filmográfico como en los dos últimos títulos, «Siegfried» y «Ocaso». Algunos pequeños cambios también ayudan a mejorarla, permaneciendo impactantes las imágenes iniciales. Zubin Mehta es un grande que ha logrado dotar de un sonido personal a la orquesta, con el que goza moldeándolo, quizá con mayor preciosismo que intensidad dramática. ¡Qué lujo, qué de lecciones en las intervenciones de Leo Nucci y Plácido Domingo en Madrid y Valencia en la misma semana! Sólo ellas valen por toda una temporada. Domingo consigue lo que todo intérprete debe intentar, recrear sus personajes respetando la idea original de los mismos. No sólo aporta ese bellísimo timbre que raramente se encuentra en los tenores wagnerianos, sino que se entrega y, sobre todo, demuestra que para cantar no hay que olvidar la inteligencia. Sabe perfectamente cómo hacer que en Siegmund brillen sus cualidades. Se lo trae a su terreno con innegable sabiduría, y ejemplo de ello es el tratamiento de sendos «Wälse!» y el modélico «Winterstürme». Este Siegmund de acentos italianos no tiene precio. Por fortuna, el resto del reparto no le va a la zaga, empezando por la Sieglinde de Eva-Maria Westbroeck, insuperable hoy día en calor, entrega y medios vocales. Jennifer Watson es la Brunhilda de nuestros días y el futuro, con una voz con proyección, agudos como cañones y, mucho más raro, una capacidad para cantar la parte de forma bella. Matti Salminen es de nuevo un Hunding perfecto, al igual que Anna Larsson como Fricka. Si se quiere, aunque también a gran nivel, podría colocarse por detrás al Wotan de Juha Uusitalo. ¿Dónde un reparto así? En ningún sitio. Y, por favor, no me digan que esto cuesta dinero. Faltaría más. Lo malo es cuando las cosas cuestan dinero y no lo rinden. El espectáculo fue retransmitido por televisiones y visto en puntos al aire libre, como la plaza de la Virgen valenciana, con cuatro mil personas congregadas. ¡Enhorabuena!