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Ana García Lozano: «Dejaría en el banquillo al señor Sebastián»
-¿Cuántas horas de gimnasia mental hace para preparar su programa «Queremos hablar» en las tardes de Punto Radio?-Unas cinco horitas. -¿Y cuántas de ejercicio físico para compaginar esa intensidad laboral con la familiar?-Uy, tendría que hacer mucho más ejercicio del que hago. Hace años hacía baloncesto y tenis y últimamente pilates, pero lo he dejado por la radio. Ahora no hago nada. -O sea, que le mantienen en forma los hijos¿-Yo me he pasado años haciendo ejercicio sólo como mamá. -Lleva años en Madrid, ¿tiene el corazón repartido entre el Valencia y¿?-Tengo marido e hijos del Real Madrid, así que imagínate. Yo sigo siendo del Valencia, porque me gusta llevar la contraria, pero el Madrid es el que se sigue en casa. -¿Alguno de sus hijos va para deportista o prefieren ser periodistas como mamá? -La nena. ¡Si yo la dejara¿! Lo que pasa es que es el espíritu de la golosina, pero ha habido algún curso en el que los sábados la llevábamos y ya la dejábamos allí, porque hacía baloncesto, fútbol¿ El año pasado hizo fútbol pero al federarse, al no haber equipos femeninos, tuvo que pasarse al baloncesto. Pero vamos, con tal de moverse, ella lo que sea, y la verdad es que se le da bastante bien. -Ha ganado en poco tiempo un micrófono y una antena de oro (el Tp de oro ya lo tenía de antes). ¿Se siente como una campeona olímpica?-Me siento muy feliz, sobre todo porque había dejado la radio hacía muchísimo tiempo y al volver me ha dado muchísimas alegrías. Pero también me siento un poquito ingrata, porque no la echaba de menos, aunque quedaría bien decirlo. -De los deportistas, casi nunca conocemos su filiación política. ¿Por qué hay tantos periodistas a los que se les notan sus tendencias?-Yo creo que es lo que se lleva ahora. Ahora no se lleva lo tibio y la gente tiene que tomar partido. Todo está salpicado de política. Hasta los niños vienen contándote cosas del colegio que tienen que ver con la política. -Si tuviera que montar un equipo de fútbol de ficción que sirviera para hacer ganar a España, ¿a qué político pondría de portero?-Al presidente del Senado, al señor Rojo, que creo que para bastante. -¿Y de delantero centro, marcando goles?-Pues pondría al presidente del Gobierno, que tiene la obligación de meter goles, ¿no? -¿Y de defensa?-A Rubalcaba. -¿Y cuál sería el entrenador?-Mariano Rajoy, porque como las cosas que pasan en el vestuario nunca nos enteramos seguro de que tienen mucho que ver con lo que se discute en el Congreso. -¿Y a quién dejaría en al banquillo para siempre jamás?-Al señor Sebastián. -¿Y cree, francamente, que todos esos políticos, por una buena causa, podrían jugar en el mismo equipo?-Estoy segura de que sí, si fuera por una buena causa¿ Lo que pasa es que a veces la política tiene poco que ver con las buenas causas. -Un debate político sin duda, no. Pero, ¿se puede ver una final de Rafa Nadal en la tele y escuchar al tiempo otra cosa en la radio?-Si te digo que yo lo hago es que estoy loca, ¿no?
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