Cantabria

Diplomacia a golpe de anchoas queso y txacolí

El lendakari, Patxi López, ayer, junto al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla
El lendakari, Patxi López, ayer, junto al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revillalarazon

CANTABRIA- Efusivos en el tono y en la forma. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, recibió ayer al lendakari vasco, Patxi López, en el Palacio de Sobrellano de Comillas, en la primera cumbre institucional entre las dos comunidades vecinas. Se trata del segundo encuentro que López mantiene con una autonomía, después de Navarra. Revilla, demostró a López que le profesa algo más que admiración. Bajo nueve banderas (tres de España, tres de Cantabria y tres ikurriñas), los representantes del Gobierno vasco fueron recibidos a su llegada con dos piezas del folclore. Revilla le dijo al lendakari: «Eres imprescindible, Patxi», y le abrazó. En el encuentro rondaba una pregunta: ¿Revilla obsequiará con anchoas al lendakari? Y se mantuvo fiel a sus costumbres: anchoas y orujo. López, por su parte, le correspondió con queso, pimientos y txacolí. En la cumbre, ambos gobiernos suscribieron un protocolo de colaboración entre comunidades en el que apuestan por que la Cornisa Cantábrica se configure como un «espacio económico integrado» en el que se busque un «mayor desarrollo económico y social» de sus respectivos territorios. Ambos consideraron como «prioritario» el tren de alta velocidad del Cantábrico, y confían en que el primer tramo, el que uniría en 20 minutos Santander y Bilbao, se acometa «sin demora». También hubo encuentro en la política antiterrorista. Elogiaron a quienes «levantan la bandera de la dignidad y la libertad» en el País Vasco y arriesgan su vida al hacerlo, y coincidieron en que el final de ETA llegará «más pronto que tarde». «No hay otra prioridad de país más que la de conquistar la paz y la libertad definitiva».