Japón
EE UU frena cualquier intento de acabar con las ayudas estatales
Los países ricos no llegarán a la próxima cumbre de jefes de Estado con una posición clara sobre la crisis.
MADRID-La reunión de los ministros de Finanzas del G-8 acabó ayer en Lecce (Italia) con la esperanza de que se confirmen los primeros signos de estabilización de las economías de los países desarrollados, pero también con las dudas de cuál debe seguir siendo el papel de los estados en la salida de la actual situación. En cualquier caso, el G-8 reconoce, como señala la agencia Efe, que los «excesivos riesgos tomados y la violación de los principios básicos de transparencia de los mercados» han contribuido a la actual recesión económica, que consideran la peor recesión desde la Gran Depresión de 1929.
Como en todas las grandes cumbres, la declaración final está llena de buenas intenciones, pero vacía de medidas concretas. El único «compromiso» adquirido en Lecce es la necesidad de un mayor control sobre el intercambio de información financiera entre los distintos países.
Italia frente a EE UU
Así, los ministros de Finanzas han pedido al Fondo Monetario Internacional su dictamen para establecer las medidas que posibiliten ir saliendo del periodo extraordinario de control estatal que se ha producido durante la crisis iniciada en el verano de 2007.
Mientras en Europa el optimismo es algo mayor, en Estados Unidos la cautela sigue presidiendo cada declaración de sus responsables económicos. El titular de Economía de Italia, anfitrión de la cumbre, Giulio Tremonti, ve signos de una vuelta a los comportamientos económicos previos a la crisis, como la especulación en los mercados de materias primas y derivados. «Es un signo de que la escasez de dinero puede haber terminado. Aún nos llevará tiempo, pero si antes éramos optimistas en la esperanza, ahora somos optimistas en los contenidos».
Ante el optimismo del ministro italiano, el secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, se mostró más cauto y advirtió de que, por el momento, no se puede hablar de recuperación. «No creo que hayamos llegado a un punto en el que podamos hablar de una recuperación de facto. Es demasiado pronto para cambiar de rumbo y contener las políticas» dijo Geithner en la rueda de prensa que cerró la reunión de Lecce.
Posiciones enfrentadas
Y es que, según fuentes de las delegaciones presentes en la cumbre que citan los medios de comunicación italianos, durante la reunión se han establecido dos frentes: el de países como Alemania, que pretenden ir retirando ya las medidas excepcionales anticrisis, y el de otros, liderados por EE UU y Reino Unido, su socio al otro lado del Atlánticos que defiende mantener aún la intervención. Sea como fuere, el G-8 (EEUU, Reino Unido, Alemania, Francia, Canadá, Japón, Italia y Rusia) ve signos de estabilización, aunque advierte de que la situación sigue siendo incierta, sobre todo en materia de empleo.
Las distintas formas de ver un mismo problema ni los congresistas
¿Qué diferencias hay sobre la percepción de la crisis a uno y otro lado del Atlántico?
–Estados Unidos y Reino Unido han sido los países que más han tenido que intervenir en sus economías para tapar los agujeros de sus sistemas financieros, sobre todo. En el reto de los grandes países europeos la situación es algo más favorable, aunque la actividad económica siga afectada.
✕
Accede a tu cuenta para comentar