El Bayern ya no asusta

Madrid- El Barcelona se empareja con el Bayern de Múnich en los cuartos de final de la Liga de Campeones y se siente feliz. Suena extraño, pero los azulgrana han cumplido su objetivo, que era no cruzarse con los ingleses tan temprano. Poco importa que nunca haya ganado en Europa al Bayern, que juegue primero en casa o que los alemanes eliminaran al Sporting de Portugal con un 12-1 total. Se trataba de librarse de los ingleses, especialmente del Manchester, con el que sólo se podría ver en la final, y del Liverpool, su posible rival en semifinales.El Bayern tampoco parece muy asustado. «El Barcelona es sin du- da un equipo fantástico y en este duelo, claro favorito. Pero el Bayern ha mostrado en el pasado que no tiene perdidos de antemano los partidos contra el Barcelona», explica Rummenigge, el presidente del equipo bávaro. Los dos equipos sólo se han cruzado una vez en la Liga de Campeones. Fue en la primera liguilla en la temporada 1998/99 y el Bayern se impuso en los dos encuentros. Antes, ya se habían encontrado en las semifinales de la UEFA en 1996. El Bayern pasó y terminó ganando el torneo.Los alemanes no atraviesan su mejor momento. No funcionan bien en la Bundesliga y las dos goleadas contra el Sporting fueron un suceso extraño entre variadas decepciones. Además, Klose está lesionado en un tobillo y parece improbable que se recupere a tiempo para enfrentarse al Barcelona. Toni pierde a su mejor socio en el ataque. Aunque el Bayern, en realidad, depende de Ribery. «Es el Messi del equipo alemán», asegura Thierry Henry. «Cuando no hay espacios, Franck puede hacer cosas. Con sus cualidades puede hacer daño al Barça, al Madrid, al Manchester o a cualquier equipo», añade. Ribery es el elemento diferente que saca al Bayern del aburrimiento. Aunque ahora el que parece aburrido es él y prepara su salida para el verano, aunque Rummenigge lo niegue. «Hay un ciento por ciento de posibilidades de que siga con nosotros», dice el presidente del club muniqués.Luca Toni es la otra apuesta ofensiva del Bayern. El delantero italiano es intrascendente en el juego, pero imparable en el área. Cualquier defensa sale perdiendo contra su 1,90 largo y su fuerza física. Márquez y Puyol lo tendrán difícil para detenerlo. Henry está convencido de que ésta es su oportunidad de ganar la Liga de Campeones. Sólo ha jugado una final, la de 2006, y la perdió contra el Barcelona cuando era el símbolo del Arsenal. En aquella final tuvo enfrente a Van Bommel, que regresará al Camp Nou ahora con la camiseta del Bayern. «Guardiola ha conseguido llevar el equipo a un rendimiento muy bueno. Me recuerda al nivel que alcanzamos cuando ganamos la ‘‘Champions''», asegura el centrocampista holandés..