«El cariño a manos llenas pero si se mima al niño no se le está queriendo bien»

Divulgadora científica, licenciada y experta en psicología publicitaria impartió en Valencia la conferencia «La educación de los padres, clave para una vida adulta feliz y saludable». -¿Se atreve a darme tres claves para conseguirlo?-Tener ganas de ser responsable; dar ejemplo, aunque sea difícil y ser coherente con lo que se dice y con lo que se es. -¿Qué les diría a las madres trabajadoras que se sienten culpables por no pasar tiempo suficiente con sus hijos?-No importa el tiempo que se pase con ellos si está bien empleado. Las madres lo hacen lo mejor que pueden y si no lo hacen es porque no saben. Estoy segura de que darían la vida por sus hijos. -¿Y a las que no saben?-Deben aprender de la experiencia con nuestros padres.-¿Independientemente del tipo de familia?-No da igual. No nos da igual a los hijos. La mayoría pide un padre y una madre. Yo me alegro de haber nacido en una familia donde estaban los dos.-¿Qué consecuencias tiene una infancia infeliz?-De las heridas más cruentas de la infancia se aprende. También pueden curarse, pero quizás se necesitan ayudas externas. -¿Es malo el exceso de cariño?-El cariño hay que darlo a manos llenas, pero hay una gran diferencia entre mimar y dar cariño, al mimar no ayudamos al niño. Si se mima al niño, se le está queriendo inadecuadamente.