Eliseo Subiela sexo tántrico

Para ser gigante hay que saber andar con zancos, y una de las reglas principales es «no mirar para abajo». Si lo haces, te caes. «Casualmente, estuve en una exhibición de yoga en Madrid y un profesor de Tantra me dijo que, además, ésta es una de las "instrucciones"que se dan en el Tao para retrasar el orgasmo masculino: elevar la mirada hacia arriba», cuenta Eliseo Subiela, director de «No mires para abajo», una coproducción franco argentina protagonizada por Antonella Costa y Leandro Stivelman, que se estrenará hoy en España y que ha sido descrita por su propio autor como un compendio de instrucciones para poder cumplir el sueño de su anterior película, «El lado oscuro del corazón»: «volar haciendo el amor». Un milagroSubiela explica que para poder hacer este filme erótico tuvo que encontrar a dos actores dispuestos a estar desnudos en la mayoría de las escenas: «Antoniella es una actriz muy reconocida en el cine argentino. Fue "un milagro"el que esta chica y Leandro, que actuaba en su primer protagónico en cine, lograran esa armonía que transmiten sus cuerpos delante de la cámara», afirma. La idea del guión surge de un libro milenario procedente de China: «El Tao del amor y del sexo». A partir de éste, el director argentino dejó volar su particular imaginería onírica para hablar del sexo tántrico, que preconiza el orgasmo sin eyacular. «Mi película es una antiporno y cuenta la historia de Eloy, un joven que después de la muerte de su padre se vuelve sonámbulo. Una noche, mientras da un paseo, dormido, por los tejados del vecindario, cae por una claraboya a la cama de Elvira, con la que experimentará las técnicas tántricas en el sexo. Ella se convierte así en maestra del joven», explica el autor, quien confiesa no haber tenido nunca una instructora como la protagonista: «En mi caso, tuve que utilizar la imaginación», afirma Subiela, que en noviembre comenzará a rodar su próxima película, «Rehén de ilusiones».