Literatura

Alcalá de Henares

Jiménez Lozano tiene la palabra

Jiménez Lozano, ayer en Alcalá de Henares
Jiménez Lozano, ayer en Alcalá de Henareslarazon

A finales de abril, en Alcalá de Henares, los pronósticos nunca fallan: el chaparrón de letras es seguro. Mientras Juan Marsé prepara su discurso de recepción del Cervantes, que pronunciará ante Sus Majestades el próximo jueves, otros de sus ilustres predecesores abren boca en el Festival de la Palabra. Primero fue Antonio Gamoneda (premiado en 2006) y ayer le tocó el turno a José Jiménez Lozano (galardonado en 2002), quien no fue capaz de leer íntegramente su disertación, pues las anécdotas y las citas le sorprendían en cada esquina para regocijo de los que se congregaron a escucharle en el Instituto Cervantes de la localidad complutense. Jiménez Lozano, que espera la publicación de un diario y un poemario que acaba de enviar a su editor, enumeró los entresijos de su oficio durante algo más de una hora. Y es que, según afirma, «haber ganado el Cervantes, a la hora de escribir, no te ayuda en nada: la cuartilla sigue en blanco». Aniquilación del «yo»Para el autor de «Los lobeznos» y «Carta de Tesa», el escritor debe aniquilar el «yo» para vivir las circunstancias de los personajes: «Como el que entra en una religión, debe dejar el yo en la portería», señala. Tampoco cree que necesite de libertades («las grandes obras literarias se han escrito siempre bajo la censura), ni de reconocimientos («basta con que un solo lector se sienta zarandeado por una sola página o un solo poema»). Por estas razones no comparte las «lamentaciones» de quienes denuncian la desaparación de la cultura impresa: «El último libro de Nietzche vendió siete ejemplares. El mundo de la Cultura es una aristocracia en la que entra sólo quien quiere». Así pues recomienda que quien escriba no tenga en la mente al público y menos para satisfacerle: «Hay escritores transnacionales, que publican en varias lenguas a la vez, con traducción simultánea, como los políticos, pero eso no tiene nada que ver con la literatura, sino con el éxito». Asegura que escribe «de prisa y a cualquier hora», pero que le va a costar hacerlo con la pipa vacía ahora que le han prohibido fumar. Renuncia a contar «lo que ha visto», prefiere que las historias le sorprendan en su imaginación porque «el primero que debe extrañarse ante un personaje es el autor».

Una tradición de trece añosRegresa, en su XIII edición, la lectura continuada de «El Quijote» al Círculo de Bellas Artes. Así, el pistoletazo de salida lo dará Juan Marsé, último Premio Cervantes, el próximo día 22 a las 12:00, y durará 48 horas. De estas, la primera se reservará para personalidades del mundo de la política, la cultura y la sociedad, para dar paso después a los ciudadanos anónimos que deseen sumarse. Se espera la participación de la nueva ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde.