La agonía del Museo del Traje

El Museo del Traje está sentenciado y no parece que haya redención posible. Ayer socialistas y nacionalistas rechazaron en el Senado una moción del PP que solicitaba «una ubicación adecuada para seguir desarrollando sus objetivos». Este intento frustrado de los populares se ha topado con los planes del Ministerio de Cultura, que justo hace un año anunció la creación de un Centro Nacional de Moda en el Matadero de Madrid y un Museo Nacional de Etnografía en Teruel. Estos proyectos implican desmantelar el actual Museo del Traje y repartir las 150.000 piezas de su colección. «Al trocearlo le quitas su valor como conjunto, me temo que muchas de las valiosas piezas se van a perder en un sótano», asegura la senadora popular, María José Nicolás, a sabiendas de que la nueva ubicación será siete veces inferior a la actual.Inaugurado el 31 de marzo de 2004 con una inversión inicial de 21,5 millones de euros que ahora parecen caer en saco roto, el Museo no llegará a cumplir diez años de existencia. Y es que en 2013 expira el plazo para devolver los terrenos donde se levanta el Museo a la Universidad Complutense, que es propietaria del terreno mientas que Cultura lo es del edificio. «Se potencia la moda»«Nada se cierra, ni desaparece, simplemente se potencia la moda y se acerca más a la sociedad», defiende el subdirector general de Museos Estatales, Santiago Palomero, que al paso aclara que «nadie discute que no haya funcionado bien el Museo del Traje, pero ahora vamos a ir a mejor. No desvestimos un santo para vestir otro». La ex ministra del ramo y responsable de la creación del Museo, Pilar del Castillo, en cambio, avisa de que «estamos ante una sinrazón que se puede corregir: descuartizar un museo con un potencial arrasador». Sobre la cesión con fecha de caducidad, defiende que «es posible, como yo tenía previsto, un acuerdo entre la Comunidad de Madrid, responsable de la financiación de la Complutense para recuperar el terreno. El problema es si el Ministerio reconsideraría su decisión de cerrarlo». La presidenta de Amigos del Museo del Traje, Amalia Descalzo, aunque no ha perdido la esperanza, mantiene que «el Museo agoniza y nadie le da oxígeno. Prueba de ello es que no se va a renovar el contrato a los trabajadores del Museo que no son funcionarios».

La Moncloa, la más beneficiadaEl complejo de La Moncloa es uno de las principales beneficiarios del cierre del Museo del Traje. Y es que hace un año, el Ejecutivo socialista firmó con la Complutense un acuerdo por el cual la Administración cederá de por vida el edificio donde su ubica el Museo a la Universidad, que ya tenía en propiedad el terreno. A cambio, La Moncloa se quedará con la Escuela de Estadística, una isleta más que apetecible junto a la residencia del presidente del Gobierno, que se verá ampliada en 2013, cuando entre en vigor el contrato.