La inteligencia nacional

La CIA de Tom Clancy, el MI5 de Ian Fleming, el Mossad de Le Carré, el CNI de¿ La verdad es que el servicio de inteligencia español es un organismo en busca de autor. Y bien mirado, no es de extrañar. Desde el 11-M la principal misión del Centro Nacional de Inteligencia es luchar contra el terrorismo internacional, sobre todo el islámico. Pero si del 11-S estadounidense no sólo sabemos perfectamente quiénes fueron los culpables y cómo llevaron a cabo el atentado, sino que ya se han hecho las correspondientes películas catárticas sobre el asunto, España sigue in albis respecto al mayor ataque terrorista de su historia. La última noticia sobre el CNI, curiosa cuando menos, es que a escasos metros de la sede del espionaje nacional, situada en la madrileña N-6, ha habido una oleada de robos violentos en las últimas semanas. Los vecinos de la urbanización Altos del Hipódromo no salen de su asombro. Aunque el CNI les somete a una vigilancia constante y a menudo tienen que identificarse ante el agente de turno, la proximidad con el centro de inteligencia no les supone una mayor seguridad personal. Todo esto coincide con una racha especialmente sangrienta en Madrid. Aunque Gallardón nos cuente que somos una de las ciudades más seguras de Europa, cuesta creerlo. En cuanto al CNI, parece tener, como la SGAE, un problema de imagen. Recordemos que otra de sus flamantes actuaciones recientes fue la de mandar a seis agentes en un Boeing para pagar un jugoso rescate a los piratas somalíes que secuestraron un atunero vasco en la primavera del año pasado. Aunque se le ha reducido el presupuesto para el 2009, mucho parecen los 255 millones de euros que se le han asignado.