Las diferencias entre la ley actual y la futura

- ¿Será peor la futura ley de interrupción del embarazo que la actual? –En la práctica, ni mejor ni peor. Lo que ha intentado el Gobierno es regular las irregularidades que se han cometido durante los últimos 25 años. Si, hasta ahora, el aborto se consideraba formalmente un delito, pero en la práctica se ha llevado a cabo sin restricciones, ahora se considerará un derecho y existirán las mismas restricciones que en la actualidad. - Formalmente, ¿en qué se diferenciarán ambas normativas? –La actual es una ley de indicaciones; la futura, de plazos más indicaciones. Esto significa que en los primeros tres meses y medio se podrá interrumpir el embarazo sin tener que aducir ninguna justificación. Después, se mantienen los mismos supuestos que en la actualidad, con la excepción del de violación, que desaparece de la nueva norma por innecesario: en caso de aborto por violación, la mujer podría acogerse a los plazos. - ¿A quién beneficiará el hecho de que el aborto sea un derecho en lugar de un delito, como hasta ahora? –Principalmente, al medio centenar de clínicas que se dedican a hacer abortos en España. El hecho de no necesitar informes psicológicos, como hasta ahora, para justificar las intervenciones, les ahorrará mucho papeleo y también dinero, pues no tendrán que tener psiquiatras en nómina para hacer su trabajo diario.- ¿Están contentas las clínicas con la reforma? –De cara a la galería, al menos, no lo están. Mañana se reúnen con la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, para hacerle llegar sus quejas y sugerencias: entre ellas, que las menores puedan abortar sin consentimiento de sus padres desde los 14 años y que se flexibilicen los platos para abortar libremente hasta las 24 semanas de embarazo. Precisamente las propuestas que manejaban en un principio los expertos nombrados por Aído. Pero es poco probable que consigan más, pues el Gobierno tiene que recabar apoyos de cara al trámite parlamentario.- ¿Qué pasará si la interrupción del embarazo se lleva a cabo fuera de los límites que marca la ley? –En la actualidad, la ley prevé penas de cárcel para quien practique abortos ilegales. Estas penas nunca se han aplicado a las pacientes. Ahora, los expertos de Aído han propuesto rebajar sustancialmente los castigos (excepto en el caso de aborto involuntario) y la propia ministra ha lanzado la proclama de que «ninguna mujer irá a la cárcel».