«Los jugadores no somos ludópatas»

-Leo que ha hecho historia en el Campeonato del Mundo de Póquer celebrado en Las Vegas...-Ha sido la mejor experiencia de mi vida.-¿Por qué juega al póquer?-Me gusta, me apasiona, me llena. El póquer es como la vida: hay que saber jugar tus cartas en cada momento, sobrevivir con cualquier cosa e, incluso, ganar con malas cartas.-Es la mujer que más dinero ha conseguido en la historia de ese campeonato: 352.832 dólares. ¿Qué hace con la pasta?-Seguir jugando, darme un capricho e invertir. Para mí es más importante ganar que el dinero.-La patrocina 888.com, el casino online número uno. Y se ha convertido en un fenómeno mediático, en una estrella del póquer...-Si eso ayuda a cambiar la imagen del póquer me parece bien. Ya no es un vicio, y los jugadores no somos ludópatas, por supuesto.-¿Es fácil dejarlo?-¿Por qué lo iba a dejar? Si no ganara nada en mucho tiempo, me buscaría la vida de otra manera. Pero no creo que eso suceda.-Viene de Las Vegas. Cuando termina una partida, ¿juega al black-jack, a la ruleta, a...?-No juego a nada más que al póquer, todo lo demás me parece hostil: el casino siempre tiene ventaja.-¿Su madre cree que la suya es una forma honrada de ganarse la vida?-Totalmente. Lo aprueba. Me ve feliz.-¿Le parece que a los hombres les produce una satisfacción especial ganar a una mujer?-No. Creo que les resulta indiferente, por lo menos, entre profesionales. A mí me da igual tener enfrente a un hombre o una mujer.-Todos los jueves protagoniza en internet el reto «¡A por ella!». ¿Van muchos a por usted?-Cada día más. Y no porque sea mujer, sino porque si me ganan se llevan 250 dólares.-Pero no es lo mismo jugar en la Red que en la mesa, ¿eh?-Claro. En Internet es mecánico; en vivo juega el factor psicológico. Hay que saber leer al adversario. Yo lo leo cada día mejor.-Los campeonatos, ahora, parecen un campus. ¿El póquer es una buena salida laboral para los jóvenes?-Si te lo tomas como un trabajo duro, que requiere mucha preparación, disciplina y paciencia, sí. Hay que estudiar bastante y estar en buena forma.-¿Es una carrera para toda la vida, o para forrarse y luego dejarlo?-Para toda la vida. Es una carrera de fondo.-No cree en la suerte. ¿Y cómo explica las malas rachas?-Cuestión de probabilidades, pura matemática. En el póquer, el factor suerte se diluye a la larga; quedan la habilidad y las matemáticas.-¿Es fácil forrarse?-No. Requiere un gran esfuerzo. Para ganar al póquer hay que tener, sobre todo, disciplina, paciencia y agresividad. Características a veces contradictorias. Yo lo defino como un juego de habilidad.-¿No se sienta a jugar sin su...?-Sin mis gafas de sol, para observar sin ser vista, y sin mi pañuelo de cuello, porque hay una vena que se me hincha cuando tengo jugada. Y a veces cuando no tengo.-¿Me recomienda el póquer para salir de la crisis?-No, ja, ja, ja. No es una solución para momentos de apuro.-Lo decía mi abuela: jugar por necesidad, perder por obligación.

¿Qué quieres ser de mayor? Leo (Barcelona, 1984) quisiera jugar y viajar. Su generación le parece libre y egoísta. Lo mejor de ser joven, dice, es la vitalidad, y lo peor de envejecer, no valerse por uno mismo. Cree que en cien jugadas ganaría a Zapatero, «en una única mano no sé, te puede ganar cualquiera».