Los «tories» devolverán los gastos parlamentarios

El líder de los Conservadores británicos, David Cameron, obligó ayer a los miembros de la oposición a devolver el dinero de todas las «facturas excesivas» que habían pasado al Parlamento bajo el concepto de dietas a las que tienen derecho por ser diputados. Bautizado como el escándalo de los «gastos de segunda vivienda», la investigación realizada por el rotativo «The Daily Telegraph» ha causado gran revuelo en Westminster. Todos los partidos políticos están implicados, pero el líder «tory» está especialmente preocupado en cómo podría afectar este episodio de cara a las elecciones del próximo año. Los conservadores parten como favoritos, pero Cameron decidió ayer actuar con rapidez, ya que, por primera vez desde hace mucho tiempo, las encuestas revelaron una pérdida considerable de puntos con respecto al mes pasado. Después de que el rotativo hiciera públicas facturas sobre comida de mascotas, reparación de pistas de tenis, mobiliario nuevo e incluso recibos de taxi con valor de 500 libras, Cameron explicó que, a partir de ahora, los conservadores sólo pasarán los gastos que se consideran «imprescindibles» para ejercer el trabajo de diputado. Tras comprometerse a devolver él mismo una factura sobre la reparación de la chimenea de su vivienda, el líder «tory» afirmó que se sentía «aterrorizado» de todo lo que había salido a la luz. «No me importa si ellos actuaron dentro de las normas. Lo que hicieron estuvo mal. Siento que haya pasado esto y siento el comportamiento de algunos diputados tories», matizó. Cameron, que amenazó con echar de sus filas a los que no devuelvan estos gastos abusivos, afirmó que entiende el enfado del público y señaló que era necesario reconstruir la reputación de Westminster «ladrillo a ladrillo». El comportamiento del ya bautizado como «nuevo premier» contrasta con el de Gordon Brown, a quien le costó tres días pedir perdón por el comportamiento de los ministros.