Valencia
Madrid: El feudo que más votos aportó a la victoria
El PP duplica su distancia con el PSOE respecto a 2004 / La corrupción pasa factura a los socialistas en sus bastiones
Más de la mitad de los votos que el PP sacó de diferencia al PSOE en las elecciones europeas salieron del feudo madrileño. Esperanza Aguirre aportó a la ventaja de Rajoy sobre Zapatero 299.361 sufragios (la diferencia entre ambos partidos fue de 582.000 votos) y acabó una vez más con las aspiraciones del PSOE de Madrid de intentar remontar sus malos resultados. «Es un resultado que refuerza al partido en conjunto, aunque, sin duda, quien sale más reforzado es Mariano Rajoy», celebró ayer la presidenta.
La moción de censura que Aguirre había planteado a los madrileños contra Zapatero fue apoyada por 1.104.318 ciudadanos, convirtiendo a Madrid en la Comunidad que más votos aportó a la victoria del PP, seguida de Andalucía y Valencia. Aguirre se impuso en 161 de los 179 municipios de la Comunidad (en 114 por más del 50% de los votos).
En la capital, Alberto Ruiz-Gallardón ganó en 16 de los 21 distritos, imponiéndose por encima de los socialistas con una diferencia de seis puntos respecto a las Europeas de 2004.
En Madrid, la victoria del PP fue aún más dulce y la derrota del PSOE, más amarga. Y es que, si Zapatero perdió contra Rajoy por 3,7 puntos de diferencia; a nivel regional, Tomás Gómez se quedó 13 puntos por debajo de Aguirre. Un descalabro mayor incluso del que sufrió en las Elecciones Generales de marzo de 2008, en las que el PP se le adelantó en casi 10 puntos.
Gómez, la gran apuesta de Zapatero para batirse contra Aguirre, cosechó un nuevo fracaso como secretario general del partido en Madrid: perdió votos en 167 ayuntamientos, mejorando su porcentaje solamente en doce de ellos.
La campaña contra el Gobierno regional, con la «operación Gürtel» como ariete, causó el efecto contrario que buscaba el PSOE, ya que el electorado del PP se movilizó por encima del socialista respaldando a su líder y en defensa de su modelo de gestión. Sin embargo, Gómez no consiguió ilusionar a sus votantes, que castigaron los múltiples casos de corrupción destapados en sus municipios y la condescendencia de éste con los dirigentes socialistas imputados. Así, tradicionales feudos socialistas como Parla, Leganés, Getafe, Pinto o Fuenlabrada pagaron con bajadas de hasta 16 puntos las presuntas irregularidades de sus regidores.
La resaca electoral fue además especialmente dura para IU. El partido que lidera Inés Sabanés perdió el puesto de tercera fuerza política de la región, frente a UPyD. La formación de Rosa Díez tiene en Madrid su principal nicho electoral.
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