Sevilla

Multitudinaria protesta contra el «maltrato» al campo andaluz

Exigen el fin de los abusivos márgenes comerciales mientras regalan unos 30.000 kilos de productos agrarios.

Algunos de los manifestantes se agolpan en el espacio que Asaja habilitó para repartir frutas y verduras
Algunos de los manifestantes se agolpan en el espacio que Asaja habilitó para repartir frutas y verduraslarazon

SEVILLA- «Tomates. Tú pagas 2,30 euros el kilo, yo cobro 0,42». «Aceite. Tú pagas 3,50 euros el kilo, yo cobro 1,70». Frases como éstas se podían leer en los numerosos carteles con los que agricultores y ganaderos recibieron ayer a los sevillanos a las puertas de su sede, antes de partir en una manifestación que reunió a unas 15.000 personas procedentes de las ocho provincias andaluzas, según la Policía, y a más de 25.000, para la organización convocante, Asaja.Encabezaban la protesta unos diez tractores y la cerraba otro muy antiguo, con un remolque de madera para simbolizar «la quinta modernización del campo andaluz». En medio, huestes de agricultores clamaron por su «supervivencia». Una de las dianas preferidas de los manifestantes fue el presidente de la Junta, Manuel Chaves, a quien acusaron de «maltratar al sector», de «rata política» y de «dar el dinero de los agricultores a su amigo Medel –presidente de Unicaja–». Pero tampoco faltaron alusiones a otros miembros del Ejecutivo andaluz como el vicepresidente y consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, a quien el secretario general de Asaja-Sevila, Miguel Afán de Rivera, calificó, megáfono en mano, de «golfo y choricete».El fin de los abusivos márgenes comerciales no es lo único que reclamaban. Denunciaban además «que la UE compre a Marruecos, los bancos no adelanten créditos, las ayudas se retrasen, no haya agua para los cultivos...». En este sentido, el presidente de Asaja-Andalucía, Ricardo Serra, lo tiene claro: «Si es posible reunirse una tarde de domingo en un consejo de ministros y buscar 9.000 millones de euros para sacar a flote una caja de ahorros, también se puede hacer un esfuerzo importante por un sector, el agrario, que es fundamental en Andalucía». Según defiende, «de los 770 pueblos de la región, 700 dependen de forma directísima de la agricultura». «El año pasado perdieron su trabajo 10.000 agricultores, éste serán 20.000 más y poco a poco nos iremos quedando sin gente», expuso a LA RAZÓN para matizar que «no es concebible una Andalucía sin medio rural». En este contexto, Serra quiso agradecer su «compresión» a la «gente a la que hoy le hemos dado un ‘tabarrón'». Molestia que a buen seguro ayudó a soportar el que regalaran 30.000 kilos de productos.

CHAVES NO LOS RECIBIÓEl final previsto de la marcha era la sede provisional de la Presidencia de la Junta, la Casa Rosa, donde los agricultores pretendían entregar un manifiesto con sus peticiones a Manuel Chaves. Pero acabaron tirando sus banderas y protagonizando una sonora pitada a las puertas valladas de ese edificio porque ni el presidente ni ningún otro miembro del Gobierno andaluz los recibió. Un gesto que «aparte de ser una descortesía, es poco inteligente porque la obligación de un gobernante es escuchar a los gobernados», sostuvo el presidente de Asaja-A, Ricardo Serra. «No éramos uno ni dos ni se trataba del sector del ajonjolí. Debían habernos recibido por responsabilidad política y no han estado a la altura», zanjó.