Nadal se cita con Alemania

La eliminatoria ante Serbia ya es historia. Una historia que será recordada por lo que ocurrió al margen de los partidos, aquello del vendaval y los asientos por los aires, por el regreso de Rafa Nadal al equipo y por el estreno de Albert Costa en el banquillo. Tenis hubo el justo y el que se vio lo puso el número uno del mundo. Serbia llegó a Benidorm derrotada y no lo abandonó humillada gracias a la victoria en el doble. Eso permitió que un sonoro Nadal-Djokovic se convirtiera en el punto decisivo. Se lo llevó el de Manacor, que incluso sin rodaje sobre tierra ba- tida carece de rival en esta superficie. Alemania es el segundo capítulo en la defensa de la Ensaladera. Será del 10 al 12 de julio, inmediatamente después de Wimbledon, en otra eliminatoria de calentamiento antes de que empiece la Davis de verdad. España ejercerá como local. Eso significa tierra batida y si se siguen los consejos de los jugadores, los que mandan ahora que Pedro Muñoz también es historia, a nivel del mar. En pa- labras de Tipsarevic, «se volverá a jugar en una playa». Los alemanes no tienen que significar un obstáculo para acceder a las semifinales, donde esperaría previsiblemente Rusia y una pista ultrarrápida. El primer gran examen.

La historia habla de un balance favorable para los germanos, 9-5, pero eso es simplemente el pasado. En los dos últimos precedentes, la victoria fue para España. El más reciente fue en 2008. En Bremen, en cuartos camino de la final ante Argentina, en una superficie rápida, España ganó 4-1. Allí estuvieron Nadal, Ferrer, Feliciano y Verdasco. En los alemanes, Kiefer y Kohlschreiber. Los protagonistas, si no hay lesiones, serán los mismos. España ha logrado ante Serbia su decimoquinta victoria consecutiva como local. Es la primera vez que emprende la defensa del título con éxito.

En las dos ocasiones anteriores, ante Holanda y Eslovaquia, actuó como visitante y se topó con pistas donde la bola no botaba que le enviaron a luchar por la permanencia. Este año todo ha cambiado. Djokovic planteó cierta resistencia a Nadal en los dos primeros sets del cuarto punto. Le sirvió para poco más que lavar su mala imagen de la primera jornada. Rafa no le dio una sola oportunidad. Ferrer se encargó de rematar la faena ante Troicki y dar paso a la fiesta en el equipo español. Albert Costa no podía disimular su felicidad. Su estreno ha sido relativamente sencillo.

En espera de que lleguen tiempos más complicados, el capitán no ocultaba su satisfacción: «Todo ha sido muy positivo. Es muy fácil trabajar con estos jugadores, les pides cualquier cosa y te lo dan todo. Estoy encantado de contar con ellos porque son unos fenómenos». Los jugadores correspondían a los elogios del capitán. «Albert nos da tranquilidad a todos. Es un capitán humilde y aprendemos de él. Desde que se retiró todos lo queríamos como capitán y ahora ya lo tenemos», comentó Ferrer. Y Nadal tampoco se quedó corto: «Tengo mucha confianza en Albert. Es bonito trabajar juntos porque siempre va de cara y estoy seguro de que va a hacer un trabajo estupendo». La Copa Davis volverá en verano, ahora llega Indian Wells.