Paul McCreesh explora el canto coral en honor a la Virgen María en el disco A spotless rose

El maestro inglés Paul McCreesh presentó hoy en Madrid el nuevo disco grabado con el coro Gabrieli Consort (del cual es fundador y director artístico), 'A spotless rose', cuyo repertorio interpretará con este conjunto vocal en la Semana de Música religiosa de Cuenca y el Ciclo de Música Sacra en las Catedrales Españolas de Fundación Caja Madrid. El álbum reúne 13 temas dedicados a la Virgen María de compositores como Stravinsky ('Ave Maria'), Swayne ('Magnificat I'), Palestrina ('Stabat Mater'), Grieg ('Ave Maris Stella') o Tavener ('A hymn to the Mother of God'). El disco hace un recorrido de 600 años de música sacra, desde el Renacimiento hasta la actualidad y está dividido en cinco partes: invocación, anunciación, natividad, crucifixión de Jesús y la visión de María como mediadora entre humanos y Dios. Pilar Tomás, directora del departamento de música de Fundación Caja Madrid, recordó que el disco tuvo origen en una serie de conciertos de música sacra organizados en 2007 por la fundación en diversas catedrales españolas. La experiencia inspiró a McCreesh a registrar la actuación de su coro el año pasado en la catedral de la ciudad inglesa de Ely y en su capilla dedicada a María.

EXPRESIÓN A TRAVES DE LA MÚSICA McCreesh declaró que no le gusta encasillarse en un tipo de proyecto (en España ya dirigió conciertos en el Teatro Real y de música a capela) y que lo que le interesa es la capacidad del ser humano de "expresarse a través de la música"y "la emoción que está por detrás de este tipo de arte". El director artístico de Gabrieli Consort (que empezó su carrera como violonchelista) declaró creer que la música sacra está inmersa en una "espiritualidad que trasciende las épocas", destacando los temas inspirados en la Virgen María. "Es un personaje muy interesante por ser paradójica. Es virgen y madre, inmensamente humana y divina, intocable y sensual, sobre todo si recordamos las obras de arte inspiradas en su figura", ejemplificó, añadiendo que en la lista inicial había cerca de 2.000 temas inspirados en María. McCreesh subrayó las ventajas de presentar música sacra en una catedral. "Está hecha para resonar con aquella acústica. El eco ayuda a crear la magia", destacó. "Además, son presentaciones abiertas, cualquiera puede entrar y quedarse y eso para los músicos, que estamos casi siempre aislados, es una oportunidad de acercarnos al público", añadió. "No soy cura ni filósofo, pero creo que esta selección de temas conduce a una reflexión personal", concluyó el McCreesh.