Estados Unidos

«Preparaos para otros 50 años»

«Preparaos para otros 50 años»
«Preparaos para otros 50 años»larazon

El presidente de Cuba, Raúl Castro, afirmó ayer que la revolución es más fuerte que nunca por no haber «cedido un milímetro», aunque advirtió al pueblo «que no se haga ilusiones» porque debe estar preparado «para otros cincuenta años de lucha».
Vestido con su uniforme de general de Ejército, Raúl Castro encabezó el acto principal en conmemoración del medio siglo de revolución, en Santiago de Cuba, donde celebró la fecha como una doble victoria por haber hecho frente al «odio enfermizo y vengativo de Estados Unidos».
Fidel Castro fue, sin embargo, el gran ausente de los festejos, aunque se convirtió en el protagonista emotivo de todo el acontecimiento. Una imagen gigante del dictador, con uniforme verde oliva, tomada en la Sierra Maestra durante la lucha armada contra Fulgencio Batista, fue colgada de uno de los edificios más importantes de la Plaza Carlos Manuel de Céspedes. Castro, de 82 años, que abandonó la presidencia en febrero pasado por una enfermedad que le ha permitido reaparecer en público, acaparó, pues, carteles y letreros en las calles y, también, el recuerdo de varios ex combatientes de su guerrilla que figuraron entre los 3.000 invitados a la celebración. «Fui participante de la lucha armada y puedo decir que seguimos luchando para ser mejores todavía. Para mí es un honor estar hoy aquí, pero siempre me figuré que estaría el comandante en jefe», dijo a Efe Calixto Sierra, de 69 años, quien se sumó al alzamiento contra Batista con sólo 12 años.
«Por problemas de salud no está hoy, pero están el segundo, el tercero y el cuarto... y confiamos en ellos», añadió, en referencia a los dirigentes de la revolución.
A medianoche, la televisión interrumpió la programación, como es tradición, para trasmitir un escueto comunicado oficial de Castro: «Al cumplirse dentro de pocas horas el 50 aniversario del Triunfo, felicito a nuestro pueblo heroico». En su discurso, Raúl evocó a Estados Unidos como «el enemigo» del presente y el futuro. E instó a «los dirigentes del mañana (...) que no se reblandezcan con los cantos de sirena del enemigo», en una clara referencia al eslógan de cambio del presidente electo de EE UU, Barack Obama.