Rania un modelo diez años después

En febrero de 1999 fallecía el rey Husein de Jordania víctima de un cáncer linfático. Su larga enfermedad le permitió dejar bien atada la cuestión sucesoria. Unas semanas antes de su muerte nombraba como heredero de la Corona al príncipe Abdulá. Toda la familia apoyó la decisión excepto el Príncipe Hasan, a quien su hermano, el Rey Husein, había nombrado sucesor en 1965.
Comenzaba así una nueva era en la dinastía hachemí. Y, de la misma manera que Hasan ponía en duda a Abdulá, no eran pocos los que cuestionaban si la que estaba llamada a suceder a la Reina Noor sería capaz de mantener la estela de estilo, «glamour» y compromiso con causas solidarias que caracterizaron a la cuarta esposa de Husein, de origen nortemaricano. Entonces llegó Rania, una kuwaití de padres palestinos y licenciada en El Cairo y Ginebra, que desde 1993 era la esposa de Abdulá. Tras acordar que Noor ostentaría el título de reina madre, Rania Al-Yassin fue coronada reina de los jordanos y se convertía en la monarca más joven del mundo. Tenía 29 años. Han pasado diez y desde entonces ha dado muestras inequívocas de su valía personal y profesional. «No soy la clase de persona que se sienta con los brazos cruzados y disfruta del título, porque no creo que sea algo para ser disfrutado. Es un mandato», reconoce esta semana en «¡Hola!» durante una entrevista en la que hace balance de su primera década como reina, esposa y madre de cuatro hijos.
Lo cierto es que en este tiempo Raina se ha convertido en un referente de estilo en todo el mundo. Y parece ser que ella misma ha querido dejar prueba de que el paso de los años ha jugado a su favor. Así, ha escogido el mismo diseño en color «nude» que vistió en su coronación para el acto central del décimo aniversario que ha celebrado con su marido en Ammán. Y si entonces fue su mejor carta de presentación y la catapultó de forma inmediata a la lista de las mujeres más elegantes del planeta, ahora la ha ayudado a reafirmarse en este particular trono gracias a la tiara y el cinturón «vintage» con el que ha rejuvenecido aún más su «look».

Fiel a su estilo
También ha abandonado los colores oscuros del maquillaje en favor de los tierra, aunque permanece fiel a su melena castaña lisa con una naturalidad meticulosamente estudiada. De la misma manera, continúan en su lista de diseñadores de referencia Gucci, Ralph Lauren y Prada.
Pero Rania es algo más que la imagen impecable de Jordania y un ejemplo de estilo a seguir. Dos han sido las principales líneas de trabajo que ha asumido como propios en su reinado: involucrarse al máximo en proyectos humanitarios en su país e intentar derribar los estereotipos más comunes del mundo árabe. Su compromiso con esas causas la llevó a ser una invitada más en el programa de Oprah Winfrey y a convertirse el 13 de mayo de 2008 en la primera reina del planeta en contar con un canal propio en Youtube.
En sus intervenciones no ha dudado en tratar temas tan delicados como los «crímenes de honor» o lucir una «kufi ya» –el pañuelo palestino– para explicar que «no es un símbolo de una conducta extremista». «Mucha gente piensa que no debería estar en Youtube, aunque para mí es un salto de fe», reconoce.