Sarkozy dispuesto a ceder a Zapatero un sillón en la cumbre

madrid- El presidente francés se ha volcado en ayudar a España para que asista a la cumbre del G-20 de Washington prevista para el próximo 15 de noviembre. Según publicó ayer el diario parisino «Le Figaro», Nicolas Sarkozy está dispuesto a ceder a España un puesto, dado que cuenta con doble representación en calidad de presidente de turno de la UE. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no quiso pronunciarse sobre la información publicada en el diario galo. En cambio, sí que reiteró su convencimiento de que España estará presente en la cumbre financiera mundial. El principal argumento que esgrime el Gobierno es que «España es la octava potencia mundial», y este motivo debe considerarse más que suficiente para justificar la presencia de nuestro país en Washington. Cualquier pregunta sobre la presencia o no de España en la cumbre y las negociaciones que el Gobierno está llevando a cabo para lograr la asistencia tuvo como respuesta el lugar que ocupamos, el octavo, en el ránking de potencias mundiales. La vicepresidenta De la Vega evitó en todo momento salirse del guión gubernamental escrito. También el presidente del Grupo Santander, Emilio Botín, que se encontraba ayer en Brasil, aseguró por su parte que España «tiene que estar presente» en la cumbre económica y se mostró «seguro» de que formará parte de los países que asistirán a la reunión. Al Partido Popular, cuyo presidente, Mariano Rajoy, ha apoyado la presencia española, no le parece sin embargo, que la «vía francesa» sea la mejor forma de asistir a la cumbre. El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, afirmó ayer que España debe asistir en su propia silla porque «de prestado no vale la pena estar en un lugar al que no te han invitado».