Valencia Madrid y Cataluña concentran la mitad de las agresiones xenófobas en 2008

Durante el año pasado, se registraron 350 agresiones xenófobas en toda España. De este total, más de la mitad se produjeron en la comunidad Valenciana, Madrid y Cataluña, tal y como recoge el informe Raxem 2009, presentado hoy por el Movimiento contra la Intolerancia. Ante esta situación, la organización pidió extender la Fiscalía especial contra delitos de odio creada en Cataluña al resto de autonomías e ilegalizar las actividades que promuevan la discriminación y la violencia por motivos de racismo. Según los datos recogidos en el informe, en 2007 tuvieron lugar 200 hechos de intolerancia, una cifra que se incrementó hasta los 350 durante 2008. El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, atribuye este incremento a varios motivos como el "mantenimiento de la impunidad, el aumento de las agresiones, la mejora de la recogida de información o el incremento de las denuncias". Los núcleos urbanos fueron los que concentraron más incidentes racistas durante el año pasado, aunque también se extendieron a núcleos rurales y a espacios diversos como El Ejido o Almería. Por regiones, la Comunidad Valenciana se situó a la cabeza de este tipo de agresiones, con 80, seguida de cerca por Madrid (60) y Cataluña (40) y más de lejos por Andalucía, Aragón, Baleares, Castilla-León y Murcia. Las causas que recoge la organización por las que Valencia lideró estos datos se centran en factores históricos, ya que existen "residuos antidemocráticos latentes". Además, apunta a la "falta de reacción"institucional "a todos los niveles y muy presente en el tiempo". Sobre este aspecto, el coordinador de la Plataforma de Acción Popular contra la Impunidad, Toni Gisbert, criticó que exista una "cobertura ideológica"y un "estímulo político"hacia esa violencia por parte de las instituciones actuales en aspectos como el favorecer el seccionismo lingüístico. También lamentó la "insuficiente" actuación de las Fuerzas de Seguridad en la Comunitat ante "la falta de detenciones e investigaciones", a pesar de que muchos de los protagonistas de los incidentes "sean conocidos". Por ello, pidió "más actuación"a Delegación de Gobierno. Ibarra coincidió con Gisbert al señalar la necesidad de reclamar más "responsabilidad política"ante el aumento en España de una "ola de xenofobia". En este punto, lamentó el incremento de este tipo de agresiones ante el actual contexto de crisis económica, sobre todo hacia la inmigración. "Se trata de una nueva ultraderecha que proyecta o aspira a rentabilizar la crisis económica y social durante su duración, en un proceso de acumulación de fuerzas que le permita un salto estratégico", contempla el estudio. Asimismo, recordó que por todo el territorio nacional se han establecido grupos neonazis que son "células autónomas que funcionan, en muchos casos, en los viveros de los campos de fútbol". Sobre las aspiraciones de este grupo, resaltó que buscan "agredir a colectivos vulnerables y a destruir la convivencia democrática". Respecto a estos grupos, el presidente del Movimiento contra la Intolerancia explicó que han creado cerca de 200 sitios web neonazis además de realizar, durante el año pasado, al menos 22 conciertos xenófobos y neofascistas. Además, subrayó que se estima que hay más de 10.000 personas vinculadas a estos grupos, en su mayoría jóvenes. Pero las agresiones no son lo único preocupante en esta situación de crisis económica. El informe también recoge varios estudios que señalan que el racismo en las aulas ha crecido en los últimos meses, especialmente contra latinoamericanos y asiáticos. Además, un 14% de los jóvenes votaría a un partido racista y un 44% aseguró preferir convivir con personas de su misma cultura y religión. Ante estas situaciones de contenido xenófobo, Ibarra abogó, en primer lugar, por extender la Fiscalía especial contra Delitos de odio y discriminación creada en Cataluña al resto de autonomías y por crear una Fiscalía en este ámbito a nivel general. por el momento, el fiscal jefe de Madrid ya anunció su creación antes de diciembre, y en Valencia hay compromisos en esta dirección. Junto a estas creaciones, Movimiento contra la Intolerancia reclama la prohibición e ilegalización de actividades que promuevan el odio, la discriminación y la violencia por motivos de racismo, xenofobia e intolerancia, como conciertos, manifestaciones y organizaciones racistas o el cierre de webs neonazis. Además, aboga por reformar el Código Penal y desarrollar una legislación antidiscriminatoria contra el racismo que contemple los derechos de las víctimas así como un Plan Integral para la prevención del racismo y otras manifestaciones relacionadas con la intolerancia.