Análisis

“Entre el ISIS y los talibanes apenas hay diferencias, son prácticamente lo mismo”

Kanishkan Sathasivam, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad de Salem, analiza los obstáculos a los que se enfrentarán los insurgentes a partir del 1 de septiembre

El valle de Panjshir, el corazón de la resistencia contra los talibanes, es la última región que no se encuentra bajo el control de los insurgentes
El valle de Panjshir, el corazón de la resistencia contra los talibanes, es la última región que no se encuentra bajo el control de los insurgentesJalaluddin SekandarAgencia AP

Los talibanes ya tienen el control absoluto de Kabul tras la salida de las últimas tropas de Estados Unidos del aeropuerto. Ahora el país entra en una nueva fase en la que los muyahidines tendrán que reconstruir el país y formar un gobierno al mismo tiempo que se enfrenta a la oposiciones de varios grupos internos, como el Estados Islámico, y logra cierto reconocimiento internacional. Kanishkan Sathasivam, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad de Salem, se muestra pesimista ante la posibilidad de que finalmente acabe imponiéndose la rama más moderada de los talibanes en el nuevo Ejecutivo.

¿Qué posibilidades hay de una guerra abierta entre los talibanes y el grupo terrorista ISIS-K en Afganistán? ¿Cuáles son los principales obstáculos a los que se enfrentarán los insurgentes a partir de ahora?

Es muy probable que actúen como un grupo legítimo y responsable capaz de gobernar en Afganistán, especialmente porque los talibanes quieren ser reconocidos por la comunidad internacional, a diferencia de antes de llegar al poder, cuando eran vistos como parias y rechazados por casi todas las potencias. Además, si están en conflicto con el ISIS, se vuelve todo mucho más complicado para EE UU estar en contra de ellos, e incluso pueden estar en posición de aprovechar su posición anti-ISIS para que la Casa Blanca los reconozca y acepte sus derechos. Personalmente, no veo nada de esto como algo que debería importarle a nadie en el mundo, porque para mí no hay una diferencia significativa entre el ISIS y los talibanes. Son prácticamente lo mismo. Pero estoy seguro de que podrán engañar sin problemas a bastantes personas y líderes de todo el mundo. Los principales obstáculos a los que se enfrentarán los talibanes a partir de ahora son los grupos de oposición internos (no el ISIS) que se oponen a ellos y posiblemente incluso luchen contra ellos, encubriendo con éxito su tiranía y abusos internos mientras mantienen su fachada internacional como actor «moderado» y «responsable», y obteniendo ayuda económica y financiera de la comunidad internacional. Entienden plenamente que no pueden regresar a un aislamiento global similar al que vivieron anteriormente, pero al mismo tiempo no estarán dispuestos a renunciar a lo que realmente son como grupo.

¿Qué rama talibán impondrá su voluntad, la más moderada o la radical en el nuevo gobierno?

Lo siento, pero no creo que exista una rama legítimamente moderada dentro de los talibanes. Quizás podamos hablar de ramas que son extremas y las que son muy radicales, pero ciertamente no moderadas bajo ningún estándar razonable. Además, los talibanes seguramente erradicarán cualquier voz moderada que pueda existir en el país, como ya han comenzado a hacer con sus registros y ejecuciones puerta a puerta.

Estados Unidos opera sus ataques con drones en Afganistán desde bases en Pakistán. ¿Islamabad permitirá que EE UU permanezca más tiempo en su territorio tras la toma de poder de los talibanes?

Según tengo entendido, la respuesta es “no”, según palabras del propio líder paquistaní, en las que afirma muy claramente que todo el apoyo paquistaní a las operaciones militares estadounidenses en toda la región llegará a su fin después del 1 de septiembre, es decir, Pakistán no apoyará en el futuro cualquier operación militar estadounidense. A mi modo de ver, esto debería poner fin de manera efectiva a la alianza militar entre Estados Unidos y Pakistán, y creo que Pakistán ahora busque expandir el alcance de su relación con China en una alianza militar en toda regla.

¿Cree que la UE aprenderá algunas lecciones del fiasco de Afganistán y su dependencia de las aventuras militares estadounidenses?

Sí que deberían aprender, evidentemente, y como consecuencia también deberían aprender la lección de no dejarse arrastrar por la política interna de EE UU y ser tan ingenuos como para creer que ciertas figuras políticas de EEUU como Clinton o Biden representan sabiduría y estabilidad en las relaciones internacionales. Sin embargo, dudo mucho que aprendan de esta lección. Y digo esto porque tampoco es práctico que la UE asuma un papel de liderazgo en las crisis mundiales, especialmente en los conflictos militarizados. A pesar de todo lo que se ha hablado de ciertos sectores, la verdad es que la UE es una organización internacional y no un Estado soberano como tal. No son los “Estados Unidos de Europa”. Entonces, cuando se habla de “liderazgo de la UE”, en última instancia, se habla del liderazgo de ciertos países dentro de la UE y no de la UE en su conjunto, y todos sabemos de qué nación en concreto estoy hablando. Especialmente ahora que Reino Unido se encuentra fuera de la UE, Francia es el país dominante, el único líder. Y es eminentemente razonable que otras naciones europeas como Reino Unido, Italia, España y Polonia no permitan sencillamente que Francia hable y actúe por toda Europa.