Venezuela

La oposición trata de ganar impulso frente a Maduro

Participarán en las elecciones regionales y locales del 21 de noviembre para superar el bloqueo

La tarjeta “de la manito” fue la más votada en 2015 cuando logró a mayoría parlamentaria y en 2016 fue ilegalizada por Nicolás Maduro
La tarjeta “de la manito” fue la más votada en 2015 cuando logró a mayoría parlamentaria y en 2016 fue ilegalizada por Nicolás MaduroMIGUEL GUTIERREZEFE

Luego de varios meses de deshojar la margarita, los partidos mayoritarios de la oposición venezolana han confirmado participaán en las elecciones regionales y locales convocadas para el 21 de noviembre. Aunque denuncian que el proceso tiene vicios y no concentra plenas condiciones democráticas, han decidido postular candidatos aprovechando que el Tribunal Supremo controlado por el chavismo reactivó la tarjeta de la Mesa de la Unidad, el instrumento de votación que agrupa a las organizaciones que perdieron sus propias tarjetas electorales por decisión oficial.

La tarjeta “de la manito” fue la más votada en 2015 cuando logró a mayoría parlamentaria, y el mayor caudal de votos en la historia del país, y en 2016 fue ilegalizada por Nicolás Maduro. Ahora vuelve a estar activar y se usará en noviembre, poniendo fin al boicot electoral iniciado en 2017.

El anuncio hecho la tarde del martes se hizo justo a tiempo antes del cierre del período de postulaciones ante el Consejo Nacional Electoral, y en voz de Henry Ramos Allup, jefe político socialdemócrata. Hasta último minuto el anuncio se retrasó porque “nadie quería asumir esa declaración tan pesada”, dijo una fuente a LA RAZÓN. Finalmente el veterano político asumió tal rol, como antes también ha hecho en momentos complicados para la imagen opositora.

La plataforma explicó que esos comicios “serán un terreno de lucha útil para fortalecer a la ciudadanía e impulsar la verdadera solución a la grave crisis de nuestro país: unas elecciones presidenciales y legislativas libres. Nos organizaremos, nos movilizaremos y nos fortaleceremos en unidad al servicio de la reinstitucionalización democrática de Venezuela”.

Ramos Allup detalló que “nosotros no podemos seguir viviendo de fantasías. Los procesos políticos no son lineales, en determinado momento si no se puede participar no se participa, si se puede participar, pues se participa. La política no es un dogma”, consultado sobre el cambio de posiciones.

El líder opositor Juan Guaidó reaccionó en Twitter diciendo que “hoy no hay condiciones ni garantías para una elección libre y justa”. Agregó que “los que decidieron participar y los que no, luchamos por la liberación y la democracia, por salir de la tragedia; en la calle, o en México. Luchamos por condiciones para salir de la dictadura”.

Fuentes de su partido Voluntad Popular, el que más tardó en decidir participar, confirman que el “presidente encargardo”, como es reconocido por Estados Unidos y otros países, no votará ni participará de las campañas electorales. En su estructura directiva se mantienen certezas de que estas elecciones “no servirán”.

Algunos partidos minoritarios de la alianza opositora también anunciaron que no participarán de una “farsa”, así como dirigentes como María Corina Machado y Antonio Ledezma, este último en el exilio. Por su parte, Nicolás Maduro se congratuló de haber logrado que sus adversarios “vuelvan al camino de la democracia”.

Faltan los nombres

Los partidos políticos aún no anuncian los nombres de las candidaturas unitarias en los 23 estados y 330 municipios del país, que se enfrentarán a los abanderados del chavismo pero también a los

aspirantes de otros grupos opositores minoritarios; una división que analistas advierten puede conducir a perder oportunidades de triunfo.

En las negociaciones de México con el chavismo, que se retoman este 3 de septiembre, queda pendiente acordar el levantamiento de las inhabilitaciones que impiden que dirigentes opositores puedan competir por votos. Por ahora son muchos políticos, incluso inhabilitados, hacen recorridos por distintas localidades impulsando propuestas, en lo que encuestadoras como Delphos han dicho es necesario para empujar el deseo de votar por encima del disminuido 50% que se registra actualmente.

En el mejor de los casos, se espera que el 21 de noviembre los candidatos de Nicolás Maduro tengan al menos dos contricantes. Dirigentes partidias opositores afirman estar concientes de la dificultad de un buen resultado electoral, pero dejan colar que ese no es el objetivo final. “Es más importante movilizar, lograr que la gente se active y podamos armar lo que hace falta par aun escenario presidencial próximo. Eso no va a ser solo de cuántaas gobernaciones quedan de un lado o del otro”, dice un directivo partidista en confidencia a este diario.

El analista Luis Vicente León, presidente de la encuestadora Datanálisis, cree que “el elector solo responderá si la oferta es realmente atractiva, moderna y esperanzadora. Los dos motivadores importantes serán la lista de candidatos y la decisión europea de participar como observadores internacionales”.

Lograr candidaturas unificadas, al menos entre quienes se asumen como “los opositores de verdad” que no han convalidado antes acciones de Maduro, se debe hacer antes del 22 de septiembre, pues hasta ese día es posible determinar qué nombres aparecerán en las máquinas de votación.

La Unión Europea aún no ha anunciado si participará de la observación. Pero Bruselas sí saludó la decisión de la Plataforma Unitaria de la oposición. Así lo indicó el portavoz del Alto Comisionado de la Unión Europea para la Política Exterior, Peter Stano, a través de sus redes sociales desde donde nuevamente hizo un llamado a que en Venezuela existan “condiciones electorales respetuosas de los estándares internacionales para la democracia”.