América Latina

López Obrador refuerza su relato indigenista tras la referencia del Papa a los “pecados” de la Iglesia

El presidente mexicano quiere que España también pida perdón por su papel en la conquista de América

El presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia de prensa matutina
El presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia de prensa matutinaPRESIDENCIA MÉXICOAgencia EFE

Andrés Manuel López Obrador,presidente de México, se ha apuntado un tanto con la carta del Papa Francisco en la que reconoció los errores “muy dolorosos” de la Iglesia católica cometidos “en el pasado”, en referencia a la evangelización en América. El dirigente izquierdista lleva años queriendo fortalecer un relato indigenista sobre lo que fue la llegada de los españoles al nuevo mundo. Así, en 2019 envió una carta al rey de España, Felipe VI, y al papa pidiendo una disculpa por los abusos cometidos por los españoles y la Iglesia católica durante la conquista del actual México. España, de momento, se ha negado a pedir perdón de forma oficial. El Vaticano no. De hecho, en 2015, en su viaje a Bolivia, Francisco ya había pedido “humildemente perdón” no sólo por “las ofensas de la propia Iglesia sino por los crímenes contra los pueblos originarios durante la llamada conquista de América”. Francisco también dijo en Bolivia que sus antecesores también había pedido disculpas por el papel de la Iglesia. Se refería en realidad al papa Juan Pablo II, quien años atrás reclamó “que la Iglesia se postre ante Dios e implore perdón por los pecados pasados y presentes de sus hijos”.

Pero la nueva misiva del sumo pontífice ha levantado ampollas ya que, según diversos historiadores, se está dando una visión de la evangelización acorde con el relato indigenista que defiende López Obrador. En una entrevista reciente con LA RAZÓN, el historiador mexicano, Juan Miguel Zunzunegui, denunció lo que tildó como “falsedad” de este discurso del presidente: “En México nunca te dicen que llegó Europa, una edad de hierro avanzada, en contraste con la cultura del neolítico. Pero esto ni siquiera se puede decir en México. AMLO tiene el trauma de la conquista. Cuando exige perdón al rey Felipe VI o al papa, quiere ese perdón para él mismo. Él arrastra el trauma”.

López Obrador ha encontrado en el papa un aliado cercano, así lo ha explicado estos días el mandatario mexicano: “Nos declaramos partidarios de la paz, de la soberanía y del amor, aunque no olvidamos, sostenemos que es tiempo del perdón y el respeto mutuo. Ahora por ejemplo, mantenemos buenas relaciones con la Iglesia católica, gracias a que el Papa Francisco es un verdadero cristiano”. También ha destacado el papel de Francia e Italia por su colaboración en las celebraciones del Bicentenario de Independencia.

A juicio de este experto, las afirmaciones de López Obrador “buscan crear un enemigo como España” y que su objetivo es tapar sus responsabilidades ante las críticas a su proyecto autodefinido como la Cuarta Transformación: “Hasta este año, nunca nadie en México había escuchado la frase: 500 años de resistencia indígena. Este gobierno, lleno de gente con apellidos españoles y europeos, decidió que todos somos indígenas y que llevamos 500 años de resistencia. La realidad es que la capital de los aztecas Tenochtitlán es tomada por 10.000 guerreros indígenas junto a los españoles. Los aztecas hacían sacrificios de niños y se enfrentaban a otros pueblos indígenas. Fueron un pueblo de la zona del norte de lo que hoy conocemos como México que conquistó el centro del país. Habla de la herencia de ‘exterminio y muerte’. Qué barbaridad. ¿Por qué no menciona la herencia de templos, catedrales, acueductos, pueblos, retablos barrocos o palacios neoclásicos?”.

A través de una carta leída por el arzobispo de Monterrey, Monseñor Rogelio Cabrera López, el papa dijo que sus antecesores y él mismo han pedido perdón por los pecados, acciones y omisiones de la Iglesia que no contribuyeron a la evangelización. “Por eso, en diversas ocasiones, tanto mis antecesores como yo mismo, hemos pedido perdón por los pecados personales y sociales, por todas las acciones u omisiones que no contribuyeron a la evangelización. (...) no evocamos los dolores del pasado para quedarnos ahí, sino para aprender de ellos y seguir dando pasos en vistas a sanar las heridas, a cultivar un diálogo abierto y respetuoso entre las diferencias y a construir la tan anhelada fraternidad”, dijo.

López Obrador hizo del indigenismo una bandera en su trayectoria política y lo elevó a eslogan durante su campaña electoral: “Por el bien de México, primero los pobres, primero los pueblos humildes e indígenas”. Sin embargo, su relación con las autoridades de pueblos indígenas no ha sido idílica. El líder de la Asamblea Indígena Múuch Xíinbal, Pedro Uk, ha explicado que el perdón ofrecido por el propio López Obrador como la solicitud hecha a España no le sirven para resarcir los daños. Esta posición le resulta contradictoria al señalar que muchos proyectos del actual gobierno de AMLO son “colonialistas”, como el denominado Tren Maya, que se extenderá a lo largo de 1.500 kilómetros e implicará un complejo reordenamiento territorial. “No le corresponde a él (Obrador), sino a nosotros, los pueblos indígenas, (definir) el tipo de relación que establecemos con otros países y con el viejo continente”, dijo Pero Uk a la agencia Anadolu.