Alemania negocia un acuerdo antiespionaje con Estados Unidos

El Gobierno alemán anunció ayer que negociará con EE UU un acuerdo que garantizará que los servicios secretos de un país no incurrirán en el espionaje del otro. Según el ministro alemán de la Cancillería, Ronald Pofalla, los primeros contactos sobre este pacto ya han tenido lugar entre el Servicio de inteligencia alemán (BND) y la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA).

Ayer fue la tercera vez que Pofalla tuvo que comparecer ante la comisión de control parlamentario de los servicios secretos desde que estallase el escándalo del espionaje. Los socialdemócratas, principal grupo de la oposición, acusan al Gobierno de ser «cómplices» del programa de espionaje estadounidense Prisma. «Existe la sospecha de que Estados Unidos realiza actividades de espionaje en Alemania», aseguró ayer el presidente de la comisión, el socialdemócrata Thomas Opperma. Pofalla, responsable de la coordinación de los servicios secretos y de la cooperación de los mismos con los servicios secretos extranjeros, volvió a defender al Gobierno alemán y aseguró que no hay el menor indicio de que se hayan producido «acciones de espionaje masivo» por parte de la Agencia Nacional de Seguridad en Alemania. El ministro reconoció que existe «una tranferencia de datos» entre ambos países, pero que ésta se limita a «casos excepcionales y concretos» y que gracias a la cooperación que existe «se han impedido entre tres y cuatro atentados semanales contra las tropas en Afganistán», aseguró. Pofalla señaló que tanto Estados Unidos como Reino Unido «han dado garantías por escrito» a Alemania de que las operaciones de espionaje «se han ceñido en todo momento a las leyes alemanas». Mientras el goteo de información sobre el espionaje no deja de salir a la luz, Merkel ha entrado de lleno esta semana en su campaña por la reelección en los comicios que se celebrarán el próximo 22 de septiembre. A un mes de las elecciones, el espionaje es uno de los temas más polémicos, del que la oposición ha querido sacar rédito político.