Atenas y Skopje llegan a un acuerdo sobre el nombre oficial de la ex república yugoslava

Atenas y Skopje llegaron ayer a un compromiso sobre el nombre definitivo de la Antigua República Yugoslava de Macedonia (FYROM). Tras 27 años de disputa, este acuerdo podría allanar el camino del pequeño Estado balcánico de dos millones de habitantes hacia la UE y la OTAN. El nombre elegido es «República de Macedonia del Norte», aunque en un principio los socios de Gobierno de Alexis Tsipras, los ultranacionalistas Griegos Independientes, habían asegurado que se opondrían a cualquier acuerdo que implicase el uso de la palabra Macedonia.

Tras el maratón negociador, el primer ministro griego y su homólogo macedonio, Zoran Zaev, acordaron que el pequeño Estado vecino tendrá un nombre compuesto con una referencia geográfica y que aplicará «Erga Omnes», es decir para todos los usos. Las conversaciones bilaterales se reanudaron después de que Zaev, el sucesor del nacionalista Nikola Gruevski, llegara al poder.

Para Macedonia el reto era conseguir luz verde en la cumbre europea de junio para iniciar las negociaciones de adhesión a la UE y una invitación para unirse a la OTAN en la cumbre del 11 y 12 de julio. Hasta ahora, Atenas había vetado cualquier acercamiento a ambas instituciones.

A cambio de la posibilidad de conservar, al menos en parte, el nombre de Macedonia, Atenas insiste en que Skopje revise su Constitución para garantizar que se utiliza tanto a nivel internacional como doméstico. Dicho cambio deberá ser ratificado en un referéndum. «Tengo buenas noticias. Hemos alcanzado un acuerdo con el primer ministro de FYROM sobre un asunto que nos ha preocupado durante muchos años», explicó Tsipras al presidente heleno, Prokopis Pavlopulos, durante una reunión que fue televisada en directo. En cambio, el presidente macedonio, Gjorge Ivanov, se mostró contrario al acuerdo. «Es una tema extremadamente importante para los ciudadanos de la República de Macedonia y no es posible que se resuelva por teléfono en un acuerdo personal entre los dos primeros ministros», afirmó Ivanov, líder de la oposición conservadora.