Pekín

Bo Xilai llama «loca» a su mujer por acusarle de conocer los sobornos

Gu Kailai, la esposa del antiguo líder regional Bo Xilai, durante el juicio
Gu Kailai, la esposa del antiguo líder regional Bo Xilai, durante el juiciolarazon

Si en el primer día del juicio en su contra el ex político chino Bo Xilai sorprendió desafiante y atacando a los testigos, el segundo no fue para menos, ya que sus palabras se fijaron esta vez en su mujer, Gu Kailai, condenada el año pasado por el asesinato del empresario británico Neil Heywood.

La llamó «loca» después de la proyección de un vídeo de once minutos con el testimonio de Gu, grabado según las autoridades el pasado 10 de agosto. «Él debía saber acerca de todo» lo que ocurría, dijo la ex poderosa abogada al ser preguntada si Bo conocía que ella y su hijo, Bo Guagua, habían recibido dinero del empresario Xu Ming, quien además habría pagado viajes de la familia valorados en 3,2 millones de yuanes, unos 250.000 euros. Sin embargo, Gu no vinculó a Bo con el asesinato de Heywood, a quien consideraba una amenaza para su hijo tras una disputa comercial, y reconoció que tenía miedo de que el joven, que estudia en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, fuera «secuestrado y asesinado». Además, recalcó que su marido era perfecto sabedor del dinero y de la existencia de una villa en Niza, en la Costa Azul francesa.

«A menudo cuenta mentiras», dijo Bo tras escuchar el testimonio de su esposa, y llegó a decir que «bajo las circunstancias de su enfermedad mental, los investigadores colocaron una enorme presión sobre ella para exponerme». Para el ex jefe del Partido Comunista en la municipalidad de Chongqing, está claro que el testimonio de Gu fue bajo presión psicológica y con la esperanza de conseguir una reducción de pena. Y es que para muchos Gu testifica en contra de su marido tras haber llegado a un acuerdo con las autoridades chinas para proteger a su hijo.

El juicio continuará hoy, y se espera que se examinen los cargos de malversación y abuso de poder contra Bo. Las actualizaciones de la jornada de ayer en la cuenta web oficial del Tribunal de Jinan no fueron tan frecuentes como el jueves, pero las puertas volvieron a estar cerradas a la prensa extranjera y sólo abiertas a un pequeño grupo de periodistas de medios oficiales.