Continúa el desmantelamiento de la «Jungla» en Calais

La « jungla » de Calais sigue desapareciendo bajo la acción de los tractores con palas que derriban una a una las cabañas que los inmigrantes se habían construido a la espera de tener una ocasión para llegar al Reino Unido.

Ayer, fue un día más tranquilo, después de los enfrentamientos que se produjeron el lunes entre un grupo de inmigrantes y activistas, y las fuerzas del orden. Pero el dispositivo policial seguía siendo igual de impresionante: un centenar de funcionarios que filtraban el acceso a la zona para evitar que se interrumpiera el trabajo de desmantelamiento.

El lunes sólo despejaron unos 5.000 metros cuadrados, pero ayer todo fue más deprisa. Etienne Desplanques, director de gabinete de la prefecto de Pas de Calais, comentó que habían logrado «liberar » una zona de unos 10.000 m2, el doble que ayer», y se felicitó de haber «mantenido a distancia » a los activistas de No Borders».

En el mismo tono se pronunció el ministro del Interior, Bernard, Cazeneuve, en un comunicado, asegurando que «el activismo de un puñado de militantes No Borders extremistas y violentos no cambiará nada». Tres de ellos fueron detenidos la víspera y serán presentados próximamente ante el juez.

Mientras, las autoridades continúan intentando convencer a los inmigrantes para que integren uno de los centros de acogida dispersos por el territorio, como los 43 que el lunes accedieron a ir a Burdeos y Montpellier. Pero la mayoría, se niega a abandonar su sueño de llegar al Reino Unido, aunque ahora no les quede ni una cabaña donde dormir.