Cuba y la UE firman el acuerdo que normaliza sus relaciones diplomáticas

El acuerdo firmado por Mogherini en la isla reestablece el diálogo político y rompe con la «Posición Común» propuesta por Aznar. El avance se produce una semana antes del viaje de Obama a La Habana. El pacto debe ratificarse en el Consejo Europeo de abril

La Unión Europea ha firmado un acuerdo con Cuba que normalizará sus relaciones y le permitirá no quedarse fuera de las oportunidades que pueda ofrecer la isla, desde que el Gobierno de Estados Unidos impulsara una nueva relación con La Habana. Después de siete rondas de negociaciones que han durado dos años, ayer se selló en la capital cubana el cambio de rumbo en las relaciones bilaterales. Un nuevo capítulo que podría empezar a escribirse desde este mismo verano.

Este acuerdo político y de cooperación, que se firmará formalmente más adelante, situará las relaciones sobre «una base legal firme» y acabará de forma paulatina con la «Posición Común» adoptada en 1996, que en su momento impulsó el ex presidente del Gobierno español José María Aznar y que aprobó el conjunto de Estados miembros. El ministro de Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, recordaba en este sentido que Cuba empezó a firmar acuerdos bilaterales con los países europeos en 2008 y la «Posición Común» «dejó de ser común hace mucho tiempo». En una rueda de prensa conjunta en La Habana con la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, ayer consideró histórico el acuerdo. A partir de ahora se cambiará la máxima que condicionaba cualquier avance en las relaciones bilaterales al respeto a los Derechos Humanos y el desarrollo de las libertades democráticas en la isla, por un diálogo político regular y mutuamente acordado. La interlocución será por lo tanto bidireccional y se seguirán tratando asuntos de interés mutuo como los Derechos Humanos, pero dejando atrás la unilateralidad que ha existido hasta ahora.

El acuerdo se ha dividido en tres capítulos: el Diálogo Político, que cubre cuestiones como la gobernanza, los Derechos Humanos, la estabilidad y seguridad internacional y regional y armas de destrucción masiva, entre otros; el capítulo sobre Cooperación, que es el más amplio e identifica los sectores de cooperación, y el tercero, el capítulo económico y de comercio. La alta representante celebró que se hayan dado los pasos necesarios para poder dejar atrás la «Posición Común», aunque recordó que el conjunto de los Estados miembros deben ratificar el acuerdo alcanzado con la isla. Ayer se cumplía prácticamente un año de la primera visita de Mogherini a la isla, y la primera también de un jefe de la diplomacia a nivel europeo, que sirvió para dar una señal inequívoca de que la UE tenía la voluntad de impulsar de nuevo los contactos.

«Las partes certifican la conclusión de las negociaciones de este importante acuerdo, que permitirán consolidar las relaciones entre la UE y Cuba en el medio y largo plazo, basadas en la reciprocidad, el respeto y el beneficio mutuo...Este acuerdo constituirá el marco para desarrollar el potencial de las relaciones y profundizar en el diálogo político y en la cooperación», señala la declaración. A partir de ahora, en Bruselas tendrá que ratificarse este acuerdo por el conjunto de los Estados miembros. Aunque Mogherini no se atrevió a poner una fecha para pasar el acuerdo con Cuba por el Consejo Europeo, aseguró que lo hará lo más pronto posible. «No puedo dar fechas, pero sí que lo haremos rápido y en paralelo al proceso de consultas para la firma y ratificación del acuerdo», explicó. Todo apunta a que podría ratificarse en un encuentro de ministros de Exteriores que está previsto para el próximo mes de abril en la capital europea. Fuentes europeas se mostraron confiadas en que el acuerdo pueda ser aprobado sin solicitar modificaciones porque de lo contrario habría que volver a sentarse a la mesa de negociaciones y el proceso se dilataría demasiado en el tiempo. En el caso de que los países se mostraran de acuerdo en su totalidad con lo negociado por la Comisión Europea, el acuerdo final con Cuba estaría listo para el verano.

El único punto que podría dar algún quebradero de cabeza es el referente a los Derechos Humanos y decidir, por otro lado, si es necesario que los parlamentos nacionales de cada país aprueben el acuerdo con la isla o no. Sobre el primero, los más reacios serán Suecia, República Checa, Polonia y Alemania. Y respecto al segundo, España y la mayoría de países prefieren que sea un acuerdo UE-Cuba exclusivamente para no tener que depender de los Parlamentos de cada país, pero otros como Reino Unido o Bélgica prefieren que la competencia sea mixta para que las decisiones no dependan solamente de la Comisión Europea.

Un nuevo marco

- Capítulo de Diálogo.

Este apartado del acuerdo incluye cuestiones de gobernanza, de derechos humanos y de estabilidad y seguridad.

- Capítulo de Cooperación.

Cuba era el único país latinoamericano que no tenía un acuerdo de cooperación con la UE, ahora queda zanjado.

- Capítulo económico.

El objetivo es caminar hacia una completa cooperación comercial entre los Veintiocho y el régimen cubano.