Política

Alemania

El Gobierno alemán desmiente que vaya a obligar a los inmigrantes a hablar alemán en sus casas

El Gobierno alemán ha desmentido que tenga intención de obligar a los inmigrantes a hablar alemán incluso en sus propias casas tras la polémica provocada por la propuesta, planteada por la Unión Social Cristiana (CSU), partido hermano de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel en Baviera.

"No forma parte del acuerdo de coalición y no se incluye en la política de gobierno", ha explicado el portavoz de Merkel, Steffen Seibert, en rueda de prensa, al ser interrogado por la iniciativa.

En cualquier caso, Seibert ha matizado que el Gobierno considera que hablar alemán es "fundamental"para la integración de los inmigrantes y para su éxito a nivel escolar y laboral.

La propuesta de la CSU aparece en un borrador en el que se establece que los inmigrantes "deberían ser incentivados a hablar alemán en su vida diaria". La iniciativa ha sido tachada de discriminatoria y objetod de burlas en caricaturas de prensa.

Incluso en el conservador 'Frankfurter Allgemeine Zeitung' se bromea con la idea en una columna en la que se recuerda que los alemanes podrían ser considerados extranjeros en Baviera, donde se habla con un fuerte acento regional.

La inmigración hacia Alemania se ha incrementado en los últimos años, principalmente de personas procedentes del este de Europa y de sirios que piden el estatus de refugiado tras huir de la guerra. Esta inmigración ha acercado a la CSU a postulados xenófobos por miedo a un ascenso de formaciones como Altenrativa para Alemania (AfD), un nuevo partido euroescépctico con un discurso duro contra la inmigración.