Videos

Valls intenta seducir a los estudiantes con 500 millones

El primer ministro francés ofrece más becas y ayudas a los sindicatos estudiantiles para frenar las protestas contra su reforma laboral

Reunión de Valls con los sindicatos de estudiantes
Reunión de Valls con los sindicatos de estudianteslarazon

El primer ministro francés ofrece más becas y ayudas a los sindicatos estudiantiles para frenar las protestas contra su reforma laboral

El Gobierno francés comenzó diciendo que la reforma laboral pasaría, si era necesario a la fuerza, recurriendo al artículo 49.3, que permite prescindir del voto parlamentario, pero las movilizacines en la calle le han obligado a ceder terreno. Ayer, el primer ministro, Manuel Valls, anunció a las organizaciones de estudiantes una serie de medidas que van desde la inserción profesional de los jóvenes a la lucha contra la precariedad, con el objetivo de apaciguar el movimiento contra la ley del trabajo. Porque las manifestaciones están perdiendo fuerza, pero la protesta se está enraizando en el movimiento «Noche en pie», que sigue llenando cada noche la plaza de la República, y se extiende poco a poco a otras ciudades. El precio de la paz social será de entre 400 y 500 millones de euros, que se destinarán a ayudas a los jóvenes. «La juventud es una energía en sí en este país, y nosotros queremos construir con ella», aseguró Valls, escoltado por sus ministros de Educación, Trabajo y Juventud, Najat Vallaud-Belkacem, Myriam El Khomri y Patrick Kanner, respectivamente, para anunciar un paquete de once medidas que estarán reflejadas en la Ley de Igualdad y Ciudadanía, que el Gobierno presentará esta semana en el Consejo de Ministros, y en nuevos cambios en la ley laboral.

El Ejecutivo va a prologar las becas de los estudiantes que hayan obtenido su diploma mientras encuentran trabajo, hasta un máximo de cuatro meses. La medida se aplicará desde septiembre de este año y concierne, según los servicios del primer ministro, a 126.00 estudiantes. También se van a revalorizar en un 10% las becas de los estudiantes de bachillerato, que pasarán a ser de una media de 697 euros por año. Y los estudiantes que disfrutan de la gratuidad de los gastos de inscripción en las universidades pasarán a recibir, además, 1.000 euros anuales. Los aprendices ya habían conseguido que el Gobierno retirara el aumento de su tiempo de trabajo y ahora, además, van a ver mejorada su remuneración. Será el Estado quien asuma este gasto, que se estima en 80 millones.

Pero la medida que ha levantado ampollas en la patronal es el aumento del coste de los contratos temporales, que hoy en día constituyen el 87% de los primeros contratos. El Gobierno espera que el aumento de las contribuciones forzará a las empresas a optar por el contrato indefinido. Pero el vicepresidente de la patronal, Thibault Lanxade, asegura que se trata de «una medida rápida que no va a facilitar el empleo de los jóvenes y va a entorpecer el trabajo de las empresas».

Martinet, el eterno estudiante

Los representantes de estudiantes estaban ayer satisfechos, pero siguen «movilizados», como dijo el líder de la UNEF, William Martinet, al que llaman el eterno estudiante. Es el líder de la UNEF, el principal sindicato de estudiantes, tiene 27 años y lleva dos al frente de la organización. Tiene una licenciatura en Biología y está inscrito en un máster de economía social. Según «Le Point», su sindicalismo no es fruto de la experiencia. Ha dado clases a los «sin papeles» y ha echado una mano en comedores populares, hasta que en 2006 le picó el virus sindical tras las manifestaciones contra del contrato laboral para jóvenes que había diseñado el Gobierno de Dominique de Villepin. Hoy es el rostro más conocido de la protesta de estudiantes; mañana podría seguir el camino de sus antecesores. Todos se convirtieron en figuras relevantes del Partido Socialista, incluido su secretario general.