Primer paso hacia el referéndum contra Maduro

El Consejo Electoral da luz verde al inicio del proceso para expulsar al presidente, pero el chavismo alargará los plazos y recurrirá a la Justicia para que la consulta sea en 2017, y así resistir en el poder

La oposición venezolana logró que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunciara ayer la aprobación del primer paso, con la validación de las firmas que entregó, para activar un referéndum revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro. Sin embargo, aún debe recorrer un largo camino de espinas con varios obstáculos en su objetivo de deponer al líder chavista. La cuenta atrás ha comenzado, pero el oficialismo promete batalla. El Gobierno cuenta con varias herramientas como el propio CNE y el Tribunal Supremo para ralentizar el revocatorio.

Tras la constancia de haber recogido los casi 200.000 apoyos (1% del padrón electoral), la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) solicitó ayer la activación del referendo. El CNE dispondrá de 15 días hábiles para estudiar la solicitud. Si la aprueba, tendrá otros 15 días para fijar la fecha y las mesas de recogida de cuatro millones de firmas (20% del padrón) necesarias para convocar la consulta. Por tanto, y si el Consejo sigue cumpliendo los plazos del reglamento –cosa que hasta ahora no ha hecho–, la fecha de la campaña de firmas sería anunciada los primeros días de septiembre.

Posteriormente, la oposición contará con tres días para reunir las firmas, tras lo cual se abrirá un compás de 15 días hábiles para que el CNE las cuantifique y verifique. Cumplido ese lapso, tendrá tres días para convocar la consulta y tres meses para organizarla.

Vicente Díaz, ex rector del CNE, pidió al Poder Electoral habilitar los 14.500 centros de votación del país, a fin de asegurar que todos los simpatizantes del revocatorio firmen. La recogida de 20% de las firmas del revocatorio probablemente se realice los días 9, 10 y 11 de septiembre, de acuerdo con Díaz. «Por lo tanto, el referéndum podría realizarse (tras sumar todos los plazos) en cualquier momento entre el 1 de noviembre y el 30 de diciembre, cómo máximo, de 2016».

Siempre con retrasos

A pesar de todo, no se descartan retrasos. Según los expertos, ya son 80 días lo que ha ganado el chavismo desde que el líder opositor, Henrique Capriles, iniciara en marzo el proceso del referéndum revocatorio. «Demoraron dos meses, 60 días, sin contar el tiempo que tardaron para darnos las planillas», afirma el ex candidato presidencial. El gobernador de Miranda convocó movilizaciones para hoy en todos los estados de Venezuela con el objetivo de solicitar al Consejo Nacional Electoral (CNE) que inicie la recolección del 20% de las voluntades necesarias para realizar la consulta.

Para revocar a Maduro, el «sí» debería sacar más de los 7,5 millones de votos con los que fue elegido tras la muerte del presidente Hugo Chávez en 2013 para completar el periodo de seis años.

La oposición quiere que el revocatorio se realice antes del 10 de enero de 2017, cuando se cumplen cuatro años del periodo que inició Chávez y viene completando Maduro. Si el plebiscito ocurriera después de esa fecha y Maduro pierde, la Constitución prevé que el vicepresidente (nombrado por el mandatario) lo reemplace. Si el referéndum se realiza antes, habrá nuevas elecciones. Según los sondeos, el chavismo perdería esos comicios. El jefe de la Asamblea Nacional, el opositor Henry Ramos Allup, reveló ayer que concurrirá a las primarias de la MUD para convertirse en candidato presidencial.

Pero antes de ese escenario, la MUD tiene que sortear nuevos retos. En junio, varios partidos chavistas presentaron una demanda de «fraude» en la recolección de firmas ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), lo que según algunos juristas podría implicar el retraso del proceso del referéndum e incluso su anulación. El Gobierno también planteó una demanda en la Fiscalía por usurpación de identidad contra los promotores de la consulta, aduciendo que entre las firmas invalidadas por el CNE figuraban miles que pertenecían a personas fallecidas, presos y menores de edad. Semanas después, otros 8.600 recursos contra la iniciativa fueron interpuestos por el chavismo ante la Justicia.

El CNE –al igual que el TSJ, acusado por la oposición de servir al chavismo– anunció que se detectaron presuntos casos de «usurpación de identidad». Tibisay Lucena, la presidenta del organismo electoral, pidió al Ministerio Público que investigue esas «presuntas irregularidades» por «usurpación de identidad» en cerca de 2.000 firmas, el argumento perfecto para invalidar la MUD.

Hay una última carta que esconde Maduro. El mandatario ha advertido de que la Constitución lo faculta para suspender «eventos de carácter electoral» en situaciones de emergencia económica, como la que rige desde enero. Si considera que hay riesgo de confrontación social, también podría paralizar el proceso. El bolivariano ya adelantó que, por las fechas, será imposible que la consulta se celebre este año.

La presión contra el chavismo crece en el exterior. Ayer, veinticinco ex presidentes latinoamericanos y un ex jefe de Gobierno español (José María Aznar) pidieron al Consejo Permanente de la OEA y a la UE que mantengan una «vigilancia crítica» sobre las «graves alteraciones al orden democrático y constitucional» que se viven Venezuela y Nicaragua.

Los plazos del revocatorio

- 15 días: para que la Comisión de Participación Política decida si la solicitud de referéndum cumple los requisitos.

- 15 días: en los que el Consejo Nacional Electoral (CNE) propone fecha para la recogida del 20% de firmas del censo electoral.

- 3 días: para la recolección del 20% de apoyos, equivalente a casi cuatro millones de firmas.

- 15 días: para que la Junta Electoral revise y cuantifique las firmas.

- 3 días: si se recogen los cuatro millones de firmas, el CNE convoca el referéndum.

- 90 días: tiene el poder electoral para organizar el plebiscito.