Lisboa

El segundo sindicato portugués se suma a la huelga general del 27 de junio

El segundo mayor sindicato portugués, la socialista UGT, se sumó hoy a la huelga general del 27 de junio convocada por la central mayoritaria, la CGTP de línea comunista, en protesta por la política de austeridad del Gobierno conservador.

El segundo mayor sindicato portugués, la socialista UGT, se sumó hoy a la huelga general del 27 de junio convocada por la central mayoritaria, la CGTP de línea comunista, en protesta por la política de austeridad del Gobierno conservador.

Esta es la cuarta vez en los últimos 25 años que los dos grandes sindicatos lusos, que agrupan a 1,3 millones de trabajadores (el 25 por ciento de la población activa), convocan juntos una huelga general, cuyo objetivo es, en esta ocasión, censurar la política económica del Ejecutivo y reclamar medidas contra el desempleo.

Este es también el cuarto paro general al que se enfrenta, en sus dos años en el poder, el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, aunque solo uno de ellos, el de noviembre de 2011, tuvo el apoyo de los dos sindicatos, en tanto los otros dos, en marzo y noviembre de 2012, los organizó sola la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP).

Carlos Silva, secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), justificó la convocatoria en la "intransigencia"del Gobierno hacia los funcionarios, así como la "dictadura"de la austeridad impuesta por exigencia de la troika (Fondo Monetario Internacional, Comisión y Banco Central europeos) y de algunos gobiernos europeos.

La UGT convocó ya el pasado viernes, junto a la CGTP, una huelga de funcionarios para el día 27, pero aplazó hasta hoy la decisión de ampliar el paro al sector privado, como hizo el sindicato comunista.

Las dos centrales justifican la protesta en la situación de los trabajadores, así como la rebaja salarial y el aumento de la jornada laboral (de 35 a 40 horas semanales) que el Ejecutivo ha decidido aplicar a los funcionarios, blanco de otros recortes por la reducción del déficit público exigida en el programa del rescate financiero a Portugal.

Silva recordó que el país roza el millón de desempleados (18 %) y condenó las políticas económicas que han provocado una "espiral recesiva"en la economía y amenazan con "destruir"la educación, la sanidad pública y el sistema de seguridad social.

Con un discurso más suave que la CGTP, el sindicalista señaló que ambas centrales tienen "objetivos similares, pero no idénticos", y sostuvo que convocar hoy la huelga, tres días más tarde que la CGTP, no tiene significado especial ni supone que su sindicato "vaya detrás o delante"del otro.

Aunque lanzó duros reproches al Ejecutivo, Silva descartó, en rueda de prensa, romper los acuerdos de enero de 2012 con el Gobierno y los empresarios (sobre reformas laborales) en pro de la estabilidad del país, y subrayó que, al contrario que la CGTP, la UGT se mantiene al margen de la petición de dimisión al Gobierno.

La convocatoria de la huelga se suma a las muchas protestas, paros y manifestaciones organizadas este año contra la política de austeridad de Passos Coelho, que gobierna con mayoría absoluta, pero ha perdido el apoyo tácito del Partido Socialista, principal fuerza de la oposición y favorito en las encuestas.

El primer ministro ha aplicado a rajatabla los recortes presupuestarios exigidos por la troika para desembolsar los sucesivos tramos del rescate de 78.000 millones de euros concedido a Portugal en mayo de 2011.