Elecciones en Italia

Italia abre su campaña electoral más incierta

En medio de sus profundas crisis internas, los partidos recurren a decenas de candidatos ajenos a la política para movilizar al electorado

Berlusconi, Renzi y Di Maio
Berlusconi, Renzi y Di Maiolarazon

En medio de sus profundas crisis internas, los partidos recurren a decenas de candidatos ajenos a la política para movilizar al electorado.

En una Italia multipolar hay cuatro partidos que pueden perder en las próximas elecciones y que ya están calentando motores. El M5S se juega su populismo, Renzi el liderazgo de la izquierda europea, la Liga Norte su xenofobia y Berlusconi su carisma. Los italianos, quienes se encuentran sumidos en un ambiente preelectoral donde reina la desesperanza, tendrán que elegir a sus representantes en medio de un panorama donde las listas electorales definitivas han mostrado que los partidos apostarán por figuras ajenas al mundo de la política y que cada uno sigue su estrategia en la lucha por la victoria.

El Movimiento 5 Estrellas (M5E), que cuenta con el apoyo mayoritario de los jóvenes, pero también con un historial lamentable en las instituciones que gobierna, parece haber hecho los deberes presentado una lista electoral medida al dedillo. Nada que ver con sus caóticas primarias. En el elenco elegido hay empresarios, periodistas, profesores universitarios, médicos, abogados, el atleta olímpico Fabrizio Donato, e incluso se postula al presidente del Potenza (un modesto equipo de la serie D del fútbol italiano), Salvatore Caiata. El motivo de esta elección, contar con un equipo multidisciplinar que se acerque a los problemas de los italianos.

Por su parte, el Partido Democrático (PD) de Renzi asiste a una desfragmentación absoluta que ha sido aún más patente tras la presentación de la lista electoral. «No es momento de controversia, las listas están llenas de buenos candidatos», defendió el ex primer ministro. Así, el PD tendrá en sus listas de Parma a Lucia Annibali, una mujer desfigurada por un ataque con ácido de su ex novio que se volvió en un símbolo de la lucha contra la violencia machista. También contará en sus listas con el codirector del diario «La Repubblica», Tommaso Cerno, como candidato al Senado.

Sin embargo, la estrategia seguida por el secretario general del PD le está costando una rebelión en el partido. Blindar a sus allegados políticos colocándolos en las localidades de fuerte tradición izquierdista y dejar a un lado las facciones más críticas del partido han ocasionado un fuerte choque interno que no hace más que atomizar el voto a favor del M5S y la coalición de centro derecha.

El bloque formado por Berlusconi y la Liga también está listo para dar el «sprint» electoral tras haber presentado la lista de sus candidatos, a pesar de la gran rivalidad de sus líderes, el ex «Cavaliere» y Matteo Salvini, por llegar a ser el próximo primer ministro de Italia. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce en este binomio político. Si no que se lo digan a Salvini, líder del partido xenófobo Liga Norte, quien en mitad de la campaña se le acumulan los problemas. Por un lado, aprieta los dientes ante las polémicas suscitadas por miembros de su propio partido. Primero fue el candidato regional en Lombardía, Attillio Fontana, quien hizo saltar las alarmas hasta en Europa con sus comentarios racistas y en defensa de la raza blanca. Ahora le toca a la alcaldesa de Gazzata, Cristina Bertuletti, con un ofensivo post sobre el Día de la Memoria Histórica en su cuenta de la red social Facebook.

El líder del Forza Italia, el octogenario Berlusconi, también está haciendo su juego. El ex primer ministro viaja con regularidad a Europa para demostrar que es capaz de ofrecer la estabilidad que el país transalpino necesita y a la vez tranquiliza los ánimos de los mercados, que miran con pavor el auge de los populismos. El ex «cavaliere» dispone de suficiente experiencia en la vida política para saber que cada palabra cuenta. Por ello, según la Prensa italiana, no ha dudado en «vender» a su compañero de coalición ante Europa si con ello consigue que Forza Italia se haga con el sillón de la sede del Palacio Chigi. En su candidatura no falta la polémica. Concurrirán tres ex participantes de Miss Italia; el ex delantero del Milán y del Nápoles Giuseppe Incocciati; el presidente del Lazio, Claudio Lotito, y del gremio periodístico al director de la revista «Panorama», Giorgio Mulè.

A poco menos de 40 días del las elecciones, queda conformado un atípico tablero político plagado de rencillas entre los partidos, desavenencias entre líderes y nombramientos que hace desconfiar a la población. Para desespero de los italianos, habrá que esperar aún a la resaca del 5 de Marzo para saber qué equipo es el vencedor.