Milán

Italia estima aprobar la ley sobre uniones civiles homosexuales antes de fin de año

El primer ministro de Italia, Matteo Renzi, estimó hoy que el proyecto de ley sobre las uniones civiles homosexuales será aprobado de manera definitiva “antes de que acabe este año”. Lo dijo durante la apertura de la Asamblea Nacional del Partido Demócrata (PD, en el Gobierno) en Milán (norte), donde previó que el texto será aprobado antes de final de año para “cerrar una cuestión abierta en Italia desde hace demasiados años y que exige una solución definitiva”.

De este modo Renzi abordó el futuro de este proyecto de ley que actualmente está bloqueado en una comisión del Senado por las miles de enmiendas interpuestas por legisladores contrarios al texto.

Además, su tramitación se ha visto interrumpida, ya que han dado prioridad a la reforma de la televisión pública, la RAI.

La promotora del texto es la senadora del PD Monica Cirinná y en el mismo se prevé la unión de parejas homosexuales sin emplear el término matrimonio y sin contemplar la posibilidad de adoptar hijos de manera conjunta, entre otros aspectos.

Muchos son los actores políticos del país que reclaman al Gobierno una legislación para las uniones homosexuales, hasta la fecha inexistente.

Tal es así que el subsecretario de la Presidencia del Consejo del Gobierno, Ivan Scalfarotto, ha permanecido veinte días en huelga de hambre para protestar ante esta ausencia de regulación.

Una protesta a la que puso fin hoy porque, según explicó en su perfil de Twitter, se fía de Renzi.

El presidente de la organización LGBT Equality Italia, Aurelio Mancuso, celebró en un comunicado las palabras del primer ministro que, a su juicio, ponen fin a “meses de incertidumbre y diferentes interpretaciones”.

Por otro lado Renzi abordó otros puntos de su programa reformista y auguró que la reforma de la Administración Pública será aprobada definitivamente antes del próximo 7 de agosto.

Asimismo señaló que en el mes de septiembre deberá aprobarse la reforma constitucional que suprimirá la función legislativa del Senado para acabar con el bicameralismo perfecto, una de sus medidas más ambiciosas.