Francia

La guerra entre los Le Pen erosiona al FN

Le Pen junto a su hija el pasado 1 de mayo
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Jean-Marie Le Pen, furioso por su exclusión del FN, le pide a su hija que se case pronto para dejar de tener el mismo apellido que él.

Jean-Marie Le Pen ha declarado la guerra a su hija después de calificar de «felonía» y «traición» su expulsión del Frente Nacional (FN), el partido que él mismo fundo en 1972. A través de una entrevista en la cadena de radio Europe 1, el patriarca de la extrema derecha francesa lanzó sus incendiarias pullas contra Marine Le Pen, a la que cedió las riendas del partido en 2010. «Me avergüenza que lleve mi nombre, me gustaría que se casara para que lo pierda lo antes posible. Que lo haga con su pareja, con [Florian] Philippot [vicepresidente del FN] o con cualquier otro», declaró el octogenario eurodiputado.

A punto de ser suspendido también como presidente de honor de la formación, Jean-Marie Le Pen no ahorró críticas contra la estrategia de Marine para moderar el discurso del partido. «Sé que se rodea de gente que no tiene el espíritu que ha presidido el FN desde hace 40 años», afirmó en una evidente alusión a Philippot y a su condición de homosexual. Tan distanciado se siente de su hija, que no desea que llegue al poder «por el momento». «Si semejantes principios morales llegan a ocupar la Presidencia del Estado, sería escandaloso», dice.

Lejos de tirar la toalla, el patriarca ultraderechista promete seguir dando la batalla: «No tengo ninguna intención de retirarme de la política (...) Lucharé por todos los medios» para «restablecer la justicia y la dignidad» en el partido. Como viejo político curtido en mil y una intrigas, advierte de que «no seré el primero en caer». «Muchos militantes del FN van a mostrar a Marine Le Pen, o ‘ex Le Pen’, lo que piensan». La aludida se limitó a declarar que los comentarios de su progenitor «muestran que no había otra solución». Ahora resta ver si esta guerra paternofilial pasa factura al Frente Nacional, que ganó las europeas de hace un año. Mientras, Marion Maréchal-Le Pen, la joven diputada de 25 años y promesa del FN, ha decidido aparcar su candidatura a las regionales de diciembre para mantenerse al margen de la disputa entre su tía y su abuelo.