La necesaria vuelta a la política

- ¿Es Enrico Letta la mejor opción para salir de la parálisis institucional que vive Italia?

–Letta es una persona competente, con experiencia internacional, porque ha sido secretario de Estado para Europa, vicepresidente del Partido Popular italiano y ministro de Industria, así que, por lo que respecta a las cuestiones nacionales, es una persona limpia. El problema es otro: como formará un gobierno en alianza con Berlusconi, pues las bases del Partido Democrático (PD) no lo entenderán y eso le debilitará a él y al Gobierno.

- ¿Qué peligros entraña esta coalición nacional que ha pedido el presidente Napolitano?

–La coalición, en cualquier caso, es una alianza «contra natura» porque el partido de Berlusconi y el PD se han enfrentado como enemigos en el pasado y para las bases será difícil de asimilar.

- En este momento qué necesita Italia ¿un Gobierno técnico-institucional o un Gobierno político?

–Habrá que esperar a ver qué plantea Letta, pero en este punto está claro que necesitamos un Gobierno político, porque el experimento del Gobierno técnico de Monti, que presentó un partido sin identidad, sin horizonte de valores, no ha salido bien. Necesitamos un Ejecutivo de naturaleza política.

- ¿Cuáles serán los asuntos más urgentes que deberá acometer el futuro Ejecutivo?

–Hay un problema institucional y hay que reformar la ley electoral, luchar contra la corrupción, abordar el desempleo, la formación universitaria, la sanidad, las muertes en accidentes de tráfico...

- Y en el terreno económico, ¿qué retos hay por delante?

–Está el problema de la inversión, porque en una Italia dominada por el crimen organizado, con una fiscalidad asfixiante y una curia corrupta, ¿qué empresario, italiano o extranjero, quiere hacer inversiones para uno o dos años?. La gente no querrá invertir en un país corrupto. La situación es realmente grave.

- ¿Qué espera del Movimiento 5 Estrellas ?

–Bueno, Grillo ha perdido casi nueve puntos de popularidad y lleva a cabo una protesta sin propuestas, sin plantear soluciones. Y esto es suicida. En este momento, la posición de Grillo es estéril. No ayuda a la resolución de los problemas, más bien los agrava.

- ¿Algún augurio sobre el ex líder del Partido Democrático, Pier Luigi Bersani?

–Bersani no ha sabido administrar la victoria y el partido está tan fracturado que es difícil predecir su futuro.

- ¿Esta crisis ha debilitado a Italia en el seno de la Unión Europea?

–Es evidente que ha perdido peso en la UE porque los partidos políticos no han sido siquiera capaces de pactar el nombre del presidente de la República.

- ¿Se puede ser optimista a partir de ahora o la política italiana puede deparar más sorpresas?

–A mí me gusta citar al ex gobernador del Banco de Italia Guido Carli, que decía que el pesimista es el que sabe cómo están las cosas, y el optimista, no. Y las cosas en Italia no están bien.