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Las autoridades chinas amenazan con la pena de muerte en casos de contaminación grave

Las autoridades chinas han dado a sus tribunales la autorización para dictar la pena de muerte en casos de grave contaminación, como un intento de calmar el creciente enfado público por la profanación del medio ambiente.

Las autoridades chinas han dado a sus tribunales la autorización para dictar la pena de muerte en casos de grave contaminación, según ha afirmado la agencia oficial china Xinhua, como un intento de calmar el creciente enfado público por la profanación del medio ambiente.

Una creciente población urbana ha empezado a plantear objeciones contra la política china de crecer a cualquier coste, que ha impulsado la economía durante tres décadas, haciendo del medio ambiente un foco de preocupación y protestas.

Así, una nueva interpretación judicial que ha entrado en vigor este miércoles impone "castigos más severos"y una aplicación más dura de la "laxa y superficial"ley de protección del medio ambiente del país. "En los casos más graves la pena de muerte podrá ser aplicada", asegura la agencia.

"Con un criterio más preciso de las condenas y las sentencias, la explicación judicial proporciona una poderosa arma legal para aplicar la ley, que espera que facilite el trabajo de los jueces y la aplicación de penas más duras para los contaminadores", sostiene Xinhua citando a fuentes gubernamentales. "Todas las fuerzas deben movilizarse para descubrir pruebas del incumplimiento de las leyes de contaminación medioambiental", añade.

Las anteriores promesas de afrontar la crisis de contaminación en china han tenido resultados diversos, y la aplicación ha supuesto un problema a nivel local, donde los gobiernos se basan con frecuencia en los ingresos fiscales de las industrias contaminantes que están bajo su jurisdicción.

Las protestas por la contaminación han irritado al Partido Comunista chino, obsesionado con la estabilidad del país. El pasado mes cientos de personas tomaron las calles en la ciudad de Kunming, en el suroeste del país, para protestar contra la producción de un elemento químico en una refinería.

Por otra parte, grupos de Derechos Humanos aseguran que China ejecuta a cientos de personas cada año, más que las cifras conjuntas de otros países. La pena de muerte está a menudo relacionada con delitos de corrupción y económicos.