Margarita de Dinamarca, a misa con la familia al completo

Ha sido la primera vez que la reina Margarita II de Dinamarca ha podido cumplir con la tradición de acudir con toda su familia al último oficio religioso que celebrado en la tarde del día de Nochebuena en la «Domkirke» (catedral) de Aarhus, la capital de la región peninsular de Dinamarca.

Ha sido la primera vez que la reina Margarita II de Dinamarca ha podido cumplir con la tradición de acudir con toda su familia al último oficio religioso que celebrado en la tarde del día de Nochebuena en la «Domkirke» (catedral) de Aarhus, la capital de la región peninsular de Dinamarca.

Acompañada de su marido, el príncipe Henrik de Monpezat, del que las malas lenguas dicen que se había separado, la reina Margarita se la veía feliz junto a sus dos hijos, los príncipes Federico y Joaquín, sus dos nueras; las princesas Mary y Marie, y sobre todo sus ocho nietos, los príncipes y princesas Christian, lsabella, Vincent, Josephine, Nikolaj, Felix, Henrik y Athena.

En un día frío de lluvia y viento, la soberana llegó la última al templo, un edificio de ladrillo construido en el siglo XIV, que estaba abarrotado de feligreses que tradicionalmente acuden a la iglesia antes de la cena de Nochebuena, que tiene lugar a partir de las seis de la tarde.

Tres cuartos de hora después, la reina Margarita y su familia se despidieron uno por uno de los pastores oficiantes del rito religioso y se dirigieron en coche al castillo de Marselis, a unos dos kilómetros en las afueras de Aarhus, donde tiene su residencia en estos días navideños.

La presencia de toda la familia real en Aarhus, y sobre todo de la reina junto con su marido el príncipe Henrik de Monpezat, atrajo a periodistas, fotógrafos y muchos curiosos, quedando demostrado que siguen juntos y lo que digan los medios sensacionalista alemanes y españoles es mentira.