Ginebra

Mueren al menos 29 personas en varios ataques en Damasco y sus alrededores

Al menos 29 personas murieron hoy y otras 65 resultaron heridas en varios ataques en Damasco y sus alrededores, de los que el régimen sirio culpó a "terroristas"y que se producen un día después del anuncio de la fecha para la conferencia de paz de Ginebra, prevista para el 22 de enero.

En uno de los ataques, al menos cinco médicos, cuatro enfermeras y dos conductores de ambulancia perecieron en la localidad de Deir Atiye, al norte de la capital, informó el Ministerio de Sanidad en un comunicado.

Según la nota, "terroristas irrumpieron en el hospital de Deir Atiye, que ofrece servicios médicos a la gente del distrito de Al Qalamún, y cometieron una masacre contra once miembros del personal sanitario".

El Consejo de Ministros condenó el ataque y aseguró que este tipo de acciones solo sirven para fortalecer la determinación de los ciudadanos para que las autoridades persigan a los grupos armados y restauren la seguridad y la estabilidad en todo el territorio sirio.

Desde hace diez días, el área de Al Qalamún, próxima a la frontera con el Líbano, es escenario de una ofensiva de las tropas gubernamentales para recuperar su control.

Las fuerzas del régimen, apoyadas por milicianos chiíes del grupo libanés Hizbulá y de las Brigadas de Abu Fadel Abás, se enfrentaron hoy a combatientes islamistas del Estado Islámico de Irak y del Levante (Siria) y del Frente al Nusra, ambos vinculados a Al Qaeda.

Por otro lado, en Damasco, al menos catorce personas perdieron la vida y otras 42 resultaron heridas por la explosión de un coche bomba junto a una estación de autobuses en el oeste de la capital.

El Ministerio del Interior informó de que un terrorista suicida detonó el vehículo en las inmediaciones de la estación, situada en el barrio de Sumerieh, en el distrito de Guta Occidental.

La televisión oficial siria mostró imágenes del lugar del atentado, con varios automóviles totalmente carbonizados y en las que podían apreciarse charcos de sangre y cristales rotos por el suelo.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos rebajó el número de víctimas mortales a nueve, entre ellas dos menores y seis miembros de las fuerzas del régimen, aunque no descartó que pueda aumentar la cifra debido a la gravedad de algunos de los 25 heridos.

También en la capital, al menos cuatro personas murieron, entre ellas una niña, y otras veintitrés resultaron heridas por la caída de varios proyectiles de mortero.

Una fuente de la Jefatura de Policía de la capital dijo a la agencia de noticias oficial Sana que al menos tres personas fallecieron y otras cuatro fueron heridas por el impacto de un cohete, disparado por "terroristas", en una casa de la calle Bagdad.

La menor pereció en un ataque similar en las proximidades de la rotonda de Al Yebe, en el barrio de Al Sheij Mohiedin, donde también hubo dos heridos.

El suburbio de Barzeh fue otro blanco de los proyectiles de mortero, que dejaron diecisiete heridos.

La sangrienta jornada de hoy se produce después de un repunte de la violencia el pasado fin de semana en la zona de Guta Oriental, al este de Damasco, donde al menos 160 personas murieron, la mayoría opositores, en choques entre el ejército leal al presidente Bachar al Asad y los rebeldes.

El lunes pasado, la ONU anunció que la conferencia de paz sobre Siria, que tendrá lugar en Ginebra, se celebrará el próximo 22 de enero, tras sufrir varios retrasos.

El régimen de Bachar al Asad reiteró ese mismo día su compromiso de contribuir a que la llamada conferencia de Ginebra 2 sea un éxito, siempre y cuando se respete lo que elija el pueblo sirio.

Por su parte, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza opositora, consideró "razonable"la fecha e insistió en sus demandas de que la reunión dé paso a un traspaso de poder en Siria a un Gobierno interino, que incluya la Presidencia, entre otras exigencias.