Tsipras se propone convertir a Grecia en un país «moderno, competitivo y solidario»

El primer ministro heleno, Alexis Tsipras, se ha propuesto convertir durante los próximos cuatro años Grecia en un país moderno, competitivo y a la vez solidario, todo ello sin abandonar los compromisos y los ajustes del rescate firmado con los acreedores.

El primer ministro heleno, Alexis Tsipras, se ha propuesto convertir durante los próximos cuatro años Grecia en un país moderno, competitivo y a la vez solidario, todo ello sin abandonar los compromisos y los ajustes del rescate firmado con los acreedores.

En su presentación al Parlamento de los objetivos del Gobierno, Tsipras no quiso dejar lugar a dudas de que su intención es aplicar cuanto antes las reformas acordadas con los acreedores y aseguró que la puesta en marcha de estas reformas es necesaria para poder acceder a los fondos para la recapitalización de los bancos y para abrir el debate sobre la deuda.

"Conseguir estos dos objetivos es una condición para poder volver al crecimiento", dijo el líder izquierdista, quien añadió que, "si todo va bien", Grecia volverá al registrar cifras positivas en el primer semestre de 2016.

A continuación, el Gobierno lanzará una serie de iniciativas para hacer la economía atractiva para las inversiones, que a su vez mantengan la cohesión social, protejan el medio ambiente y ponga en valor la propiedad del Estado, en lugar de malvenderlo, explicó.

Aseguró que, cuando llegue el momento de hablar sobre el alivio de la deuda, algo previsto una vez que las instituciones den a Grecia un aprobado en la primera revisión del rescate, el Gobierno presentará una estrategia y propuestas claras.

Precisó que el objetivo es lograr "alargar los plazos de devolución, transformar los tipos de interés en estables, obtener un periodo de gracia y condicionar el pago de la deuda al crecimiento económico".

Pero, más allá de las medidas que impone el rescate, el Gobierno griego acometerá una serie de profundas reformas en todos los sectores, con el objetivo de modernizar el país y hacerlo atractivo para las inversiones, y a la vez emprenderá acciones sociales que llevarán el sello izquierdista.

"Nuestro objetivo estratégico es crear por primera vez en Grecia un sistema nacional de solidaridad"y una red de sanidad que garantice el acceso universal a los servicios médicos y hospitalarios, con un nuevo modelo de atención primaria, dijo Tsipras.

El Gobierno fomentará además la investigación científica y sacará provecho de los científicos griegos, modernizará la educación primaria y secundaria, con un nuevo sistema de evaluación de los maestros, y emprenderá medidas para luchar contra el desempleo y para garantizar la seguridad social, prometió Tsipras.

Reconoció que el sistema de pensiones griego requiere una profunda reforma -incluso si no la hubieran exigido los acreedores- que ponga fin a una serie de privilegios y resuelva el problema de sostenibilidad.

"Nuestra reforma tiene como objetivo lograr pensiones dignas, pero no solo para mi generación sino también para las venideras", dijo.

Alexis Tsipras describió la lucha contra la evasión fiscal y la corrupción, así como la implantación de un sistema tributario justo, como uno de los principales pilares de su nueva gestión.

"Nos comprometemos a seguir esta lucha para liberar al país de situaciones que lo convirtieron en paria de Europa", prometió el primer ministro, quien anunció que su Ejecutivo intensificará los controles de las listas con potenciales evasores fiscales, y en particular la conocida como lista Lagarde, que incluye más de un millar de nombres.

Amén de todas las medidas, Tsipras abordó en su intervención el problema de los refugiados, "la crisis dentro de la crisis", un problema que, dijo, divide nuevamente a Europa.

"Contra la lógica de las vallas, tenemos que demostrar que es posible la humanidad, la solidaridad y la dignidad", sostuvo el líder izquierdista, quien se comprometió a establecer los cinco puntos de registro en las islas acordados con los socios.

Mañana Tsipras viajará junto con el canciller austríaco, Werner Faymann, a Lesbos, una de las islas que sirven de puerta de entrada para los migrantes y refugiados a Europa, donde se deberá crear antes de finales de noviembre un centro de registro e identificación.

Con su discurso programático de hoy, Alexis Tsipras abrió el debate de tres días que culminará en la medianoche del miércoles con la votación de confianza al Gobierno.

Ingrid Haack/Efe