Uruguay descarta controles especiales a turistas cuando legalice la marihuana

Durante estos días, varios turistas «despistados» se han acercado a las farmacias uruguayas preguntando por la disponibilidad de marihuana. Pierden el tiempo. Primero, porque la legalización del cannabis, aprobada por ley el pasado 10 de diciembre, podría no entrar en vigor en el país iberoamericano hasta el próximo mes se septiembre. Y segundo, porque todos aquellos extranjeros que no sean residentes ni estén registrados tendrán terminantemente prohibida su adquisición.

Las dudas entre la población extranjera sobre la legalización siguen abiertas. «Aquí no puede venir un turista e ir a la farmacia a comprar cigarrillos de marihuana. Ahora se va a regular la producción, la distribución y la comercialización para los uruguayos. No guarda ninguna relación con los extranjeros. No es similar al caso de Holanda. El propio presidente lo ha dicho. Los ciudadanos uruguayos deberán registrarse individualmente o a través de clubes en las estructuras del servicio nacional de salud», explicó a LA RAZÓN Benjamin Liberoff, director nacional de Turismo. De esta forma, tendrán la posibilidad de comprar hasta 40 gramos al mes.

Liberoff explicó asimismo que no se tomarán medidas especiales en los aeropuertos para controlar a aquellos turistas que quieran sacar droga del país. «No vamos a tomar ninguna medida que no tome ya la agencia nacional contra la droga», afirmó. En todo caso, recalcó que «Uruguay ha sido uno de los países más activos en lo que respecta a la lucha contra el narcotráfico. Somos de los que ha tenido mayores incautaciones. El combate no para».

El máximo responsable del turismo uruguayo también salió al paso de las críticas vertidas desde la ONU. «Lo primero que debería ver la ONU es que en Uruguay tenemos un éxito espectacular en el fracaso contra el narcotráfico. Por eso, deberían buscar alguna fórmula que nos ayude», afirmó. También, y en referencia a EE UU, aseguró que «algunos estados de un país más grande que el nuestro han tomado la misma medida. ¿Levantan la voz porque nosotros somos pequeños? Eso deberían preguntárselo».

Con todo, no descartan volver atrás. Eso sí, siempre «que nos planteen alternativas mejores. El propio presidente de la República ha dicho que esto es un intento de superar una situación dolorosa. Hemos observado que estamos perdiendo la batalla. Y por eso, seguimos un camino diverso al que hasta ahora se ha seguido en el resto del mundo. No somos tozudos ni obcecados. Lo que queremos que nos ayuden. Pedimos comprensión y ayuda», concluyó.