Frutoterapia

Cada vez estoy más convencida de que la cuesta de enero la sufrimos también en septiembre. Durante el verano hemos gastado más de lo debido y ahora lo notamos con la vuelta al cole, las extraescolares, el gimnasio y, también, con la compra de potingues con los que recuperar una piel machacada por el sol. ¿Por qué no recurrimos a la frutoterapia o cosmética a base de frutas? Estas son mis recomendaciones:

–Para exfoliar el rostro, haz una mascarilla con dos almendras reducidas a polvo y mezcladas con una cucharada de miel y una pequeña de zumo de limón. Aplicar durante 15 minutos y retirar con agua tibia.

–Para hidratar el cutis, tritura fresas y mézclalas con miel hasta conseguir una pasta homogénea. Dejar actuar 20 minutos.

–Para las arrugas, diluye un poco de leche con agua y lava la cara con esta mezcla a diario. Es más eficaz si empapamos algodones y los dejamos 10 minutos sobre la piel.

–Para reducir las manchas, utiliza la mezcla de una cucharada de miel y otra de limón. Aplica con un algodón y retira tras 15 minutos.

–Reparación del cabello: opta por una mascarilla a base de aceite de almendras. Calienta el aceite unos segundos y después aplícalo en el cabello. Déjalo actuar antes de aclarar.

–Y para las más gourmet, Carmen Navarro recibe a sus clientes con su famosa «Agua para los sentidos»: una mineral con pepino, limón, canela, frambuesa y jengibre. Además inaugura centro en la calle Montesquinza, en Madrid. Para mí, el centro más acogedor de los que tiene en la capital.