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Aitor Ocio: Un metrosexual gastronómico

Ex futbolista y empresario. Su abuela, su madre y Karlos Arguiñano son los maestros de una cocina que cuida al detalle

Aitor Ocio: Un metrosexual gastronómico
Aitor Ocio: Un metrosexual gastronómicolarazon

Su Selfiereceta: Pasta con zanahoria. Ex futbolista y empresario. Su abuela, su madre y Karlos Arguiñano son los maestros de una cocina que cuida al detalle

Su Selfiereceta: Pasta con zanahoria

-Cocer la pasta: tagliatelles, spaghettis... (suele utilizar pasta integral, pero por supuesto puede ser pasta normal)

.-Pochar a fuego lento una cantidad generosa de zanahoria, que previamente hemos rallado. Para ello utilizamos aceite picante (es bueno tener una botella de aceite de oliva virgen con 7-8 cayenas para estas ocasiones).

-Añadir la pasta, ya cocida, a la zanahoria que reposa en la sartén y rallar queso parmesano.

-Retirar del fuego y cuando la sartén ya no esté muy caliente añadir dos huevos batidos.

-Por último, poner un poco de nuez moscada.

Cuando el ex futbolista Aitor Ocio, invita a su casa, no puede faltar «el sorbete de mandarina que hago con la Thermomix y siempre triunfa». Ahora, gracias a que fue una hormiguita durante su época de futbolista, montó la clínica Henao y los centros de masaje Oriental Spa, de ahí que sea un empresario de éxito en Bilbao. Se sigue cuidando muchísimo por dentro y por fuera y a ello contribuyen sus negocios y su forma de vida: «Debo reconocer que no cocino habitualmente, pero es cierto que cuando lo hago disfruto mucho. Algunas recetas las aprendí de mi madre y de mi abuela. Otras directamente viendo los programas de Karlos Arguiñano, de quien me declaro admirador. Veía algún plato que me interesaba y al día siguiente intentaba copiar la receta que había visto en el programa». Quizás, sean los garbanzos con espinacas o los garbanzos con arroz que prepara su «amama» con los que pierde el sentido. Como buen vasco, confiesa que disfruta mucho comiendo y de las largas sobremesas en buena compañía. Gracias a sus mil y una vueltas al mundo su paladar está abierto a nuevas experiencias: «Me encanta probar todo tipo de cocinas, pero si tuviera que elegir una sola me quedaría con la oriental. Soy un apasionado del sushi. Me gusta por sus sabores y texturas, y porque es muy nutritiva y muy adecuada para mi tipo de dieta». Aitor es un hombre separado con una hija, por ella ha vuelto a jugar al fútbol como aficionado porque la cría es una loca del balompié. De ahí que nunca falten en su frigorífico los yogures y la fruta y que apenas consuman azúcares, ni grasas saturadas. También abundan las proteínas, los hidratos de carbono y la fibra. Y lo más raro que ha cocinado ha sido «un oso panda de sushi para mi hija Naia».

Aitor Ocio es perfeccionista, lo era como jugador de élite y lo sigue siendo. Compra la carne, el pescado y las verduras en el mercado de abastos,«donde las mujeres de los puestos ya me conocen y saben mis gustos, además, me gusta dejarme aconsejar. Para el resto suelo ir a grandes superficies». Si algo le fascina es la comida de fusión, la japo-peruana y sobre las espumas e hidrógenos de la «científica» se muestra diplomático, «me parece que tiene mucho mérito la labor de I+D que requiere este tipo de cocina y lo que hacen con los productos hasta convertirlos en obras de arte».

Y tiene un sabor retenido en su memoria gustativa «el de las tortas con chocolate que preparaba mi abuela cuando nos juntábamos a merendar con la familia». Y con el tiempo ha ido cambiando algunos hábitos que resultan poco saludables para mantenerse en forma físicamente «he sustituido el azúcar por la stevia, he reducido el consumo de lácteos y sólo consumo harinas integrales».

Mi restaurante favorito «Son muchos los restaurantes que me gustan pero por la amistad y la admiración personal que siento por Aitor Arregui, me decantaría por el restaurante Elkano en Getaria».