El presidente de Islandia quiere una ley que prohiba la piña en la pizza... pero no puede

El mandatario islandés aseguró que crearía una ley que impidiese incluir este ingrediente en la pizza pero no puede. “Me alegra no tener ese poder” ha bromeado

El debate está abierto y no es para broma. Tanto es así que ha llegado a convertirse en cuestión de Estado. Piña en la pizza, ¿sí o no? Si le pregunta al ciudadano de a pie, encontrará opiniones para todos los gustos, siempre que dicho ciudadano no sea italiano, que consideran dicho ingrediente en su plato estrella poco menos que una aberración. Pero lo que no dejaba de ser una conversación de andar por casa parece que ha llegado a las más altas instancias, al menos en Islandia.

¿Que por qué? Pues porque Gudni Th. Jóhannesson, el presidente de Islandia, realizó recientemente unas polémicas declaraciones en las que, no sólo se manifestaba en contra de la piña como uno de los ingredientes de la pizza, sino que aseguró que pensaba que debería estar prohibido por ley.

Durante su intervención en una charla ante los alumnos de un instituto de su país, éstos comenzaron a hacerle preguntas más o menos relacionadas con su ámbito privado, como su equipo de fútbolo o sus preferncias personales en determinados temas. Fue entonces cuando alguien se atrevió a abrir la caja de Pandora: ¿Piña sí o piña no?

Recuerdan la polémica que provocó aquella receta de un conocido chef británico que se atrevió a incluir chorizo en la paella y por poco crea un conflicto internacional con los valencianos, que se sintieron profundamente ofendidos en lo más profundo de su ser.

Pues las palabras de Jóhannesson han levantado una polémica similar. El presidente islandés aseguró que no sólo se oponía por completo a dicha “aberración”, sino que estaba dispuesto a crear una ley que prohibiera incluir piña en la pizza en territorio islandés.

Las redes sociales empezaron a echar humo ante la “piñaenlapizzafobia” desatada por el mandatario. Tanot fue así, que lo que en principio comenzó como una broma le obligó a publicar una aclaración en su cuenta de Facebook para “tranquilizar” a todos aquellos partidarios

Aseguraba en dicho texto que le gustaba la piña, pero no en la pizza y que no tenía el poder de crear leyes que prohiban dicha mezcla. “Me alegra no tener ese poder”, explicaba. y Para el final, dejaba una frase que ha abierto otra polémica inmediatamente. “Para la pizza, prefiero el marisco”. Pero ese, es otro debate.