Alain Delon: «Dejen en paz a Polanski»

El actor descarta presidir el 24 de febrero la ceremonia de los César y se solidariza así con el director, quien renunció a la presidencia tras las presiones que aún sufre por las acusaciones de abuso a una menor en 1977

Fue su hija, Anouchka, quien el pasado jueves sugería en su cuenta de Instagram que su padre, el francés Alain Delon, presidiera la 42ª edición de los Premios César, que se celebrará el 24 de febrero en París. Lo hacía publicando una imagen de Delon en la película «Astérix en los Juegos Olímpicos» (2008), en la que precisamente interpreta a Julio César, y que tituló: «He aquí el presidente de los Cesar. ¡Ave, él!». La respuesta del actor, de 83 años, no se hizo esperar y tan sólo un día después de la publicación fue tajante al desmentir las especulaciones: «Si me pidieran presidir los César, no lo haría en solidaridad con Polanski», explicó al diario «Le Figaro».

- Acoso mediático

Delon quiso aprovechar las declaraciones para mostrar su rechazo al acoso mediático al que su compañero está siendo sometido desde que el pasado día 18 la Academia francesa de las Artes y Técnicas del Cine hiciera oficial que el presidente de la gala anual de sus galardones iba a ser Polanski. La designación fue seguida de numeras protestas por parte de varias organizaciones, como «Osez le feminisme!», que anunció su intención de convocar una manifestación en las puertas de la Sala Pleyel de París el día de la ceremonia, alegando «la tolerancia social que aún existe en Francia con la violación». También la ministra francesa de los Derechos de las Mujeres, Laurence Rossignol, tildó de «chocante» el nombramiento para ese acto del ganador de un Oscar por mostrar «una indiferencia hacia los hechos que se le reprochan».

Unos hechos que se remontan a hace 40 años, cuando el director de «El pianista» (2002) fue denunciado por violación a una menor después de una sesión fotográfica en Los Ángeles. Tras ser declarado culpable y pasar 47 días en prisión, fue puesto en libertad bajo fianza y en 1978 abandonó Estados Unidos por temor a que un juez pudiera imponerle una condena más severa. Se instaló entonces en Francia, donde no podía ser extraditado al poseer nacionalidad tanto francesa como polaca, país donde nacieron sus padres. «¿Es que le van a hablar de 1970 cada vez que salga a la calle? ¡Déjenlo en paz!», añade Delon en sus declaraciones a «Le Figaro».

- Debate injustificado

Pero las presiones surtieron efecto y un día después de su nombramiento, en un comunicado y a través de su abogado, Polanski anunció, «profundamente entristecido», su renuncia a presidir la gran noche del cine francés, aunque no dudó en considerar «injustificado» el debate generado, que había «dañado a su familia», rechanzado además la invitación a la ceremonia. Por su parte, la Academia ha querido mostrar «total respeto a su decisión» y su presidente, Alian Terzian, ha remarcado a «Le Figaro» que «no hemos de olvidar que es una de las figuras artísticas más importantes del mundo. Ha recibido cuatro Globos de Oro, un Oscar, dos Osos y ha presidido el jurado del Festival de Cannes», y concluye: «La decisión de renunciar ha sido suya. Yo no voy a seguir alimentando la polémica».

Hace dos años Polanski consiguió llegar a un acuerdo económico con la menor denunciante, que decidió finalmente retirar todos los cargos, aunque ello no impidió que un tribunal de Los Ángeles desestimara la petición del equipo legal del cineasta para cerrar definitivamente el caso.