Londres

Carole Middleton, la suegra más odiada

La madre de Kate Middlenton lleva el control del hogar de su hija
La madre de Kate Middlenton lleva el control del hogar de su hijalarazon

Apocas semanas de que la Duquesa de Cambridge dé a luz su segundo vástago, los rotativos ingleses, en especial «The Daily Mail», están criticando el comportamiento de la suegra de Guillermo, Carole Middleton, que parece que es algo más que una madre acaparadora con su hija. Según el rotativo británico, Middlenton pasa más tiempo en casa del príncipe y la duquesa de Cambridge que en su hogar, convirtiéndose así en la tercera en discordia. «The Daily Mail» no puede ser más gráfico al titular: «Ahora hay tres personas en el matrimonio de Kate y Guillermo. ¿La intrusa? La suega Carole Middleton, que está tomando el control de sus vidas».

Su hija, que al parecer sufre continuas molestias producto de su embarazo, le ha pedido ayuda para compaginar sus obligaciones oficiales con el cuidado de su primogénito, George y también de su padre. Cada noche le prepara al príncipe su bocadillo preferido de queso con tostadas, que come mientras ve la televisión. También le lleva uno de sus dulces preferidos, unas tabletas de chocolate de sal marina, y es la responsable de la decoración del hogar. Como si no tuviese ya suficiente, se ha encargado de elegir las telas y el mobiliario de la habitación del bebé que está por llegar.

Fuentes cercanas a la casa real británica no dan crédito. Con ironía comentan en susurros de Carole Middleton es la versión femenina de Michael Fawcett, el ex mayordomo del príncipe de Gales, que controlaba hasta el más mínimo detalle de sus múltiples residencias. Ante la invasión de su domicilio familiar –el padre de Kate, Michael, mientras se encarga de las chapuzas, como exterminar los topos que invaden el jardín de la propiedad–, Guillermo calla y otorga. La Prensa especula que quizá sea que por fin ha encontrado el calor de hogar que no tuvo de pequeño tras morir su madre y después de que su padre se casase con Camilla de Cornualles, con la que mantiene una relación cordial, pero distante.

Conducta invasiva

A pesar de esta conducta invasiva, Carole es consciente de que tiene que poner límites. Según una fuente cercana a la familia: «Es muy consciente de que algún día su yerno será el rey de Reino Unido y le tiene en un pedestal, pero también sabe que su hija la necesita mucho». Con todo, los Middleton se han convertido en el núcleo duro de la pareja y palían su aislamiento visitándolos continuamente, algo que ha provocado un distanciamiento entre el príncipe de Gales y Guillermo. Tampoco ve mucho a otros miembros de su familia, como su prima Zara Phillips, que es la madrina de su hijo, George.

El inminente encargo que tiene Carole es elegir a la nueva ama de llaves de la familia. Guillermo y Kate ya han publicado en la revista «The Lady», que buscan «una ama de casa con experiencia para llevar una gran casa familiar en Norfolk. La discreción y la lealtad es lo más importante». Entre los requisitos que se solicitan están la limpieza de todas las habitaciones, el mantenimiento de la ropa de sus propietarios y ayudar en el cuidado de los niños y de los perros.

Después del nacimiento del segundo hijo de la pareja, como ocurrió con George, la familia se trasladará a Anmer en compañía de los Middleton durante al menos seis semanas. «Carole y Michael estarán allí como los abuelos devotos acompañándolos». ¿Y la presencia de la Familia Real? Ni estarán ni se los espera, dado que el alejamiento es cada vez más pronunciado.